Sin fronteras: África del norte y Medio Oriente en el mapa colaborativo cubano (I)
La actual crisis sanitaria mundial ha develado, como nunca antes, la verdadera calidad o los niveles de eficiencia de los sistemas político-sociales existentes. Si en siglos previos pudo haberse matizado las consecuencias de similares catástrofes, bajo la conocida justificación de incipiente madurez- para aquellos entonces- del sistema capitalista emergente, y con ello, del desarrollo de la medicina, de los avances de las investigaciones epidemiológicas, de la eficacia en el control social, de la alfabetización, etcétera; hoy no faltarían razones para cuestionar el alto costo padecido, pues nunca antes existió mejor infraestructura, así como capacidad productiva para garantizar lo necesario. La pregunta se impone: ¿es la falta de recursos o el modo de gestionarlos? Ciertamente, el presente ha jugado en contra del orden de las piezas, de las posiciones en el tablero, de los intentos de jaque; no por revertirlo, sino por mostrar sus más oscuras diligencias.
Cuba, dentro de toda la vorágine global, ha expuesto la actitud esperada de una potencia económica. Con un total de 2309 casos, ha sufrido la lamentable pérdida de 85 personas[1], para una letalidad que ya cuantifica por debajo de 4%, proeza para un país subdesarrollado. Tal nivel de control responde a altos estándares de conocimiento en materia de salud, lo cual le ha permitido no solo establecer el cuidado doméstico, sino llevar la experiencia a regiones foráneas.
Entre los destinos extranjeros de invaluable e ineludible ayuda se encuentran las áreas de África del Norte y Oriente Medio, con las cuales han existido fuertes vínculos históricos. De la subregión del Magreb han destacado las relaciones con Argelia desde la lucha por su independencia y luego en el apoyo militar contra la invasión marroquí en 1963. Ni qué decir del apoyo a la causa saharaui por el logro de su independencia. Cuba ha contribuido a la formación profesional del pueblo saharaui desde los campos de refugiados en la zona del Tinduf.
Con respecto a Egipto, destaca la sólida amistad con G. Abdel Nasser y con la justa causa palestina. También Siria ha sido uno de los países con un fuerte vínculo con Cuba, incluso en el actual contexto de guerra que vive esa nación árabe, al igual que las relaciones de hermandad con Irán. Mientras Argelia y la población saharaui refrendan vínculos de larga data con Cuba, para el Golfo Pérsico la primicia está en la fortaleza que van adquiriendo los lazos de cooperación bilateral con Kuwait, Qatar y Arabia Saudita. Estos países del Golfo, con una gran riqueza en hidrocarburos, han estado entre los principales receptores de los servicios médicos cubanos.
Por lo tanto, ambas regiones no han estado exentas de vínculos político-diplomáticos y de colaboración con Cuba, aspecto éste que se han ampliado en los últimos años. Por ello es entendible que con la actual pandemia de coronavirus los médicos cubanos que laboran en varios de estos países se hayan incorporado a los esfuerzos por combatir la Covid-19 así como el reforzamiento de la presencia médica cubana.
Argelia y el pueblo saharaui: junto a Cuba antes de la pandemia
Argelia tiene una importancia trascendental para Cuba cuando se trata de la cooperación médica. Fue precisamente este país el destino de la primera brigada de médicos que partió desde la mayor de las Antillas, con el propósito de atenuar el devastado sistema de salud argelino. Una vez alcanzada su independencia, el país norafricano tuvo que enfrentar una fuga masiva de sus médicos hacia Francia. Fue en este escenario que, el 23 de mayo de 1963, arribó una delegación de 56 especialistas a Argel, entre ellos 29 médicos, cuatro estomatólogos, varios oftalmólogos, 14 enfermeros y varios técnicos de la salud. Este hecho marcó el inicio de la colaboración médica internacionalista que Cuba ha mantenido como pilar durante todos estos años. El 23 de mayo de 2020 se cumplieron 57 años de la salida de Cuba de esa primera delegación de especialistas que cumplieron misión de ayuda médica en Argelia.
En la actualidad, el país magrebí mantiene más de 850 colaboradores cubanos, quienes trabajan junto a los argelinos en 15 provincias y más de 50 municipios de Argelia.[2] Los galenos cubanos prestan atención sobre todo en el sur del país, en pleno desierto del Sahara, y en el gran altiplano, donde las carencias y necesidades de salud son mayores. Trabajan en hospitales, y también en carpas colocadas en zonas desérticas, enfrentándose a un idioma diferente y a duras condiciones climáticas propias del desierto, pero con la convicción de que su trabajo ha dado frutos en un país que le está agradecido por tantos años de colaboración.
La crisis producida por la pandemia del coronavirus también ha llegado a la nación africana, donde se propaga rápidamente. El primer caso positivo a la Covid-19 se reportó el 24 de febrero, hasta acumular 11 268 infectados y 799 fallecidos (18 de junio de 2020).[3] El país figura como uno de los con mayor posibilidad de propagación del virus debido a su amplia demografía. Junto a Egipto, son las naciones del Norte de África más afectadas.
Los más de 850 médicos cubanos que laboran en Argelia se han unido a las autoridades sanitarias del país en la lucha contra la pandemia. Han mantenido la disciplina y acatado todas las medidas sanitarias aplicadas por el gobierno argelino, que ha desempeñado un papel certero en estos momentos de crisis, adoptando importantes medidas de control para eliminar y minimizar los efectos del nuevo coronavirus. Los galenos cubanos se han mantenido en sus puestos de trabajo y también prestan capacitación al personal de salud argelino.
En medio de la difícil coyuntura epidemiológica, el jefe de la Misión Médica en el país, el Dr. Reinaldo Menéndez, apuntó que todos los colaboradores “están bien y trabajando” y “no tenemos que lamentar ningún compañero enfermo”.[4] En el combate contra la Covid-19 en el país del norte de África una vez más se ha puesto de manifiesto el rol de la mujer cubana. Más de la mitad de los especialistas que allí se encuentran son mujeres, que además de sus labores asistenciales, también han contribuido con la confección de medios de protección.
No solo en Argelia los galenos cubanos cumplen misión internacionalista. En el Magreb también están presentes en los campamentos de refugiados saharauis, donde ayudan a enfrentar la pandemia. La brigada de médicos cubanos lleva 43 años en los campamentos de refugiados saharauis, desde que el gobierno de Cuba reconociera a la antigua colonia española como Estado independiente. Entre el personal médico que batalla contra el virus en los campos de saharauis, localizados en pleno desierto argelino se encuentran seis especialistas. Los cubanos junto a los médicos saharauis encaran la tarea de evitar el contagio y la propagación del virus en estos campos donde las condiciones de vidas y atención a la salud son mínimas. Contribuyen sobre todo con la capacitación del personal saharaui y en la parte logística.
Cuba y el Golfo Pérsico: el caso de Kuwait
Aunque las relaciones diplomáticas fueron establecidas entre ambos países en 1974, constituyendo el primer país del Golfo Pérsico en reconocer a la Revolución Cubana, los vínculos entre Cuba y Kuwait adquirieron una real fortaleza tras la apertura en La Habana de la embajada árabe en el año 2010[5]. Entre los renglones priorizados de esta relación se encuentran: cultura, economía, salud y medio ambiente. Una de las instituciones de mayor protagonismo en el balance de la cooperación es el Fondo Kuwaití para el Desarrollo Árabe[6], desde el mismo la isla caribeña ha podido acceder a créditos blandos con rango de pago de hasta 20 años y, además, un 2 por ciento de interés.
De esta forma, se han invertido cuantiosos recursos para la reparación o ampliación de los sistemas de acueductos cubanos, tales como los de Santiago de Cuba y Holguín, permitiendo la mejoría de los servicios hidráulicos que benefician a casi 600 000 personas. Habría que añadir además los fondos destinados para la rehabilitación del sistema de acueductos y alcantarillados de La Habana, bajo un crédito de 75 millones de dólares.[7] No obstante, el campo de acción diplomática también se expande hacia una visión multilateral de las relaciones internacionales, pues los dos Estados intercambian en foros de gran importancia en favor de una postura política alternativa en el mundo, tales como: el Movimiento de Países no Alineados y el Grupo de los 77 más China.
En cuanto a la esfera de la medicina, en el año 2010, tras la apertura de la embajada, se firmó un convenio que permitió el envío de galenos cubanos a dicha parte del mundo; incluso, los intercambios han sido más abarcadores, pues en materia científico- médica se ha patentizado la colaboración y visita de personal del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba a dicho país, así como la implementación en pacientes kuwaitíes de medicamentos cubanos como el Heberprot- P, útil para combatir las úlceras del pie diabético.
Previo a la pandemia del coronavirus laboraban en Kuwait 96 médicos cubanos, 198 enfermeros y 4 especialistas de otras ramas de la medicina[8]. Sin embargo, Cuba y Kuwait han continuado estrechando potencialmente los vínculos de colaboración. En el marco de la actual pandemia del coronavirus ambas naciones refrendaron un nuevo acuerdo direccionado hacia el sector de la salud[9]. Ya para inicios de junio de 2020 cerca de 300 trabajadores adicionales del sector de la salud arribaron al Estado árabe, en un equipo conformado por doctores de varias especialidades y enfermeros.
El reconocimiento y agradecimiento por el gesto vino desde los altos encargados políticos: Ministros de Salud y de Relaciones Exteriores de Kuwait, los cuales, junto al Embajador de Cuba en dicho país, estuvieron presentes en el acto de bienvenida. Dicho Memorándum de Entendimiento permitirá a los cubanos permanecer alrededor de un semestre en la nación y principalmente, en el cuidado intensivo de los pacientes en peor estado. A la llegada de esta brigada, ya el país árabe cuantificaba más de 30 650 infectados y más de 450 muertes; la mayoría de los casos provienen de trabajadores indocumentados, específicamente de Egipto, Bangladesh y la India.
[1] Datos actualizados por el Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) hasta el 20 de junio de 2020.
[2] Juan Carlos Díaz Guerrero. Cuba y Argelia, rica historia de solidaridad que empezó por la salud. Prensa Latina, 23 de mayo de 2020. Disponible en: https://www.prensa-latina.cu
[3] Datos disponibles en: https://weather.com/es-US
[4] Juan Carlos Díaz Guerrero. Médicos cubanos en Argelia, firmes en trinchera de amor y esperanza. Prensa Latina, 4 de abril de 2020. Disponible en: https://www.prensa-latina.cu
[5] Admirable colaboración entre Kuwait y Cuba. 6 de marzo de 2019. Disponible en: http://www.opciones.cu/internacionales/2019-03-06/admirable-colaboracion-entre-kuwait-y-cuba/
[6] Ídem
[7] Ídem
[8] Enfrentan en Kuwait Covid 19 con apoyo de brigada médica cubana. Disponible en: http://www.cubaminrex.cu/es/enfrentan-en-kuwait-covid-19-con-apoyo-de-brigada-m��dica-cubana
[9] Cuban medical contingent Henry Reeve Brigade arrives to Kuwait. Disponible en: http://misiones.minrex.gob.cu/en/articulo/cuban-medical-contingent-henry-reeve-brigade-arrives-kuwait.
Fuente: Cubadebate
Tema: Acontercer cubano en salud. Publicado: sep 24th, 2020.