Crean en Rusia un detector del SARS-CoV-2 y otros virus en el aire
La planta Zverev de la compañía Shvabe, que forma parte del consorcio Rostec, presentó el dispositivo Detector-BIO para encontrar virus en el aire, incluidos los coronavirus, así como bacterias y toxinas. El aparato permite analizar una muestra de aire en un lapso de 10 a 30 minutos.
El dispositivo, diseñado junto con el Instituto Gamaleya, que desarrolló también la vacuna contra el COVID-19 Sputnik V, sirve para garantizar la seguridad en eventos públicos, instalaciones de infraestructura, metro, aeropuertos, estaciones de ferrocarril y centros logísticos, estadios y salas de conciertos, señaló su desarrollador Nikolái Tishkunov en una entrevista con Sputnik.
“Siempre hay polvo en el aire, pero si alguien estornuda o entra gente, las partículas empiezan a oscilar, entonces se activa el dispositivo y selecciona pruebas”, explicó Tishkunov.
El especialista compara este proceso con el de una aspiradora. El Detector-BIO toma un gran volumen de aire —15 metros cúbicos de aire— y lo convierte en una muestra líquida.
La muestra, a su vez, se divide en tres partes: una se archiva, otra es para la llamada prueba PCR, que ahora se usa para detectar los coronavirus, y la tercera se somete al inmunoanálisis que detecta la presencia de sustancias.
“Y todo es en tiempo real. Así, mediante dos métodos paralelos analizamos y determinamos si hay un patógeno dañino. Y después, todos los datos se envían al recientemente establecido Centro Nacional de Monitoreo de Amenazas Biológicas en Rusia”, explicó.
Y si hay una amenaza, se dará una señal especial para llamar a los especialistas de las agencias correspondientes.
“La idea de las operaciones epidemiológicas es identificar y localizar el área de infección lo antes posible. Luego pueden aplicarse las medidas de cuarentena dependiendo de lo que se detecte. Lo importante es prevenir la propagación de la infección por toda la ciudad. Y no es solo el coronavirus, sino también la gripe que también causa graves secuelas”, añadió.
Según Tishkunov, el Detector-BIO es capaz de detectar hasta 86 agentes infecciosos de naturaleza viral y bacteriana, en particular la peste y el ántrax, así como toxinas en el ambiente de manera totalmente automática.
“No existe un análogo completo de nuestro dispositivo en el mundo. Existe un programa de monitoreo de amenazas similares en EEUU, hay importantes desarrollos en Singapur y Corea del Sur. Todos vamos en la misma dirección, pero por diferentes caminos”, indicó.
¿Cómo se detecta el SARS-CoV-2 en el aire?
Sin embargo, en EEUU este sistema no es tan autónomo, observó el desarrollador ruso. “Se requiere una gran implicación humana allí. Tenemos un dispositivo que puede funcionar durante siete días sin ningún operador. Tiene suficientes reactivos, y no necesita revisión todos los días”, señaló.
El especialista agregó que la empresa está trabajando para aumentar la autonomía del Detector-BIO a 30 días.
La planta fabricó varios dispositivos para que el Gobierno los pruebe. Uno de ellos se instaló en la propia planta, otro en el parque industrial y el tercero, en el Instituto de Defensa, donde la concurrencia de la gente es alta.
“Gracias a Dios, no hemos tenido ningún contagio. Se trata de evitar riesgos”, subrayó Tishkunov.
Las pruebas del dispositivo se completaron en junio, pero su certificación todavía no se ha concretado. Se estima que en 2021 empezará la producción en serie del Detector-BIO.
“Estamos preparados al máximo. Si es necesario, estamos listos para producir tantas unidades como necesite el cliente”, adelantó.
(Tomado de Sputnik)
Fuente: Cubadebate
Tema: Noticias. Publicado: sep 14th, 2020.