Brote de la enfermedad por virus del Ébola en República Democrática del Congo
La respuesta al brote de la enfermedad del virus del ébola (EVE) en la República Democrática del Congo sigue siendo un desafío complejo. Los focos de renuencia de la comunidad y la configuración del conflicto continúan obstruyendo las actividades en algunas áreas afectadas. También se pueden anticipar desafíos adicionales durante el período de elecciones en curso, lo que puede llevar a una mayor tensión política, un deterioro de la situación general de seguridad y violentos disturbios civiles, presentando una amenaza indirecta a las operaciones de respuesta al ébola.
A pesar de estas dificultades, se han logrado avances significativos en las áreas afectadas por el brote, especialmente en Beni, donde ha habido una disminución general en la incidencia de casos en las últimas semanas. El control del brote allí, y anteriormente en la ciudad de Mangina, demuestran cómo se puede controlar el brote cuando las actividades de respuesta se pueden escalar e implementar con la participación de las comunidades locales. Si bien el Ministerio de Salud (MoH), la OMS y sus socios trabajan para lograr un progreso similar en Katwa, Butembo y otros grupos emergentes, se deben reconocer los desafíos únicos que surgen en cada área geográfica. La introducción, aceptación y el impacto resultante de las intervenciones en la epidemiología del brote llevará tiempo. Los equipos de respuesta continúan adaptando y ampliando la aplicación de medidas de salud pública basadas en evidencia y herramientas innovadoras.
Actualmente, el brote sigue activo en un área geográficamente dispersa que abarca 14 zonas de salud en las provincias de Kivu del Norte e Ituri. En los últimos 21 días (del 27 de noviembre al 18 de diciembre de 2018), se han notificado 114 nuevos casos confirmados, de Katwa (31), Beni (18), Komanda (17), Butembo (14), Mabalako (14), Kalunguta (5), Oicha (4), Vuhovi (3), Kyondo (3), Biena (1), Mandima (1), Masereka (1), Musienene (1) y Mutawanga (1). Solo la zona de salud de Tchomia no ha confirmado ningún caso nuevo desde que se detectó a mediados de agosto. La amplificación del brote en estas áreas ha sido impulsada por una combinación de transmisión social / comunitaria y dentro de centros de salud públicos y privados. En la última semana, se han notificado dos nuevas infecciones en trabajadores de la salud, para un acumulado de 55 infectados hasta la fecha (53 confirmados y 2 probables), de los cuales 19 han fallecido.
Desde el inicio del brote hasta el 18 de diciembre, se han notificado 549 casos de EVE (501 confirmados y 48 probables), incluidas 326 muertes (59%), en 12 zonas de salud de la provincia Kivu del Norte y en tres zonas de salud de la provincia Ituri. Las tendencias generales en la incidencia de casos reflejan la continuación del brote en estas áreas, con un promedio de 35 casos nuevos informados cada semana desde mediados de octubre.
Se siguen obteniendo victorias pequeñas, pero significativas con el despido de los sobrevivientes de los Centros de Tratamiento del Ébola (CTE); ayudado por las admisiones más oportunas a los CTE y el uso de terapias contra el ébola junto con medidas de atención de apoyo. En la última semana, 18 pacientes adicionales fueron dados de alta de CTE. En total, 193 pacientes se han recuperado hasta la fecha.
Si bien todas las alertas creíbles fuera de las áreas afectadas mencionadas anteriormente han dado negativo a la EVE hasta la fecha, sigue existiendo un riesgo muy alto de mayor propagación geográfica dentro de Kivu del Norte e Ituri, a otras provincias de la República Democrática del Congo y a los países vecinos. Las actividades de preparación y preparación operativa en estas áreas deben continuar ampliándose para mitigar este riesgo, y detectar y responder rápidamente a cualquier caso potencial.
Respuesta de Salud Pública
El Ministerio de Salud sigue fortaleciendo las medidas de respuesta, con el apoyo de la OMS y sus asociados. Las prioridades incluyen coordinación, vigilancia, rastreo de contactos, capacidad de laboratorio, prevención y control de infecciones (IPC), manejo clínico de pacientes, vacunación, comunicación de riesgos y participación de la comunidad, apoyo psicosocial, enterramientos seguros y dignos (SDB), vigilancia transfronteriza y actividades de preparación en provincias y países vecinos. Las prácticas de prevención y control de infecciones en los centros de atención médica, especialmente las clínicas prenatales, deben fortalecerse aún más.
Fuente: Organización Mundial de la Salud
Tema: Actualización. Publicado: dic 24th, 2018.