Idioma e identidad
Todo profesional, sea médico, químico, botánico o lingüista debe estar familiarizado con el léxico de su especialidad. Sin embargo, suele suceder que algunos términos son usados incorrectamente, o que se recurre a préstamos léxicos de otras lenguas para nombrar determinados fenómenos o situaciones para los que la lengua materna ya dispone de denominaciones propias. Si exceptuamos los diccionarios especializados, realmente son pocos los estudios que en la lengua española se dedican a este problema de la comunicación en las ciencias médicas.
Todo especialista debe conocer el verdadero significado de cada término que va a utilizar y utilizarlo bien, con precisión y claridad, pues ello le permitirá una mejor organización de sus ideas, le facilitará comunicarse con mayor exactitud y fluidez.
“En cualquier trabajo científico, usar una palabra por otra, o darle un contenido que le es ajeno, es incurrir en un error peligrosísimo que puede costar la anulación de magníficas ideas”.
… “A veces es más fácil apropiarse de un término extranjero durante la lectura de una obra científica que buscar su exacto equivalente en español. Por otra parte, no falta quien, al intercalar unos cuantos extranjerismos en su forma de hablar o de escribir, erróneamente piensa que con ello demuestra más elevado nivel de conocimiento o información”.
“Claro está que ninguna lengua carece de préstamos léxicos. El español ha hecho suyos numerosos vocablos procedentes del árabe, el italiano, el francés, el inglés, el alemán e incluso de las lenguas indoamericanas. Pero casi siempre este fenómeno del préstamo responde a una necesidad específica de la comunicación. Cuando esa necesidad no existe, el préstamo, más que enriquecer el caudal léxico del individuo, limita sus posibilidades de expresarse correctamente en su lengua materna.
¿Por qué decir «by-pass» cuando en español tenemos la palabra «derivación»? Lo mismo sucede con términos como «clearance», «flutter», «set», «toilette» y muchas más, para las cuales nuestra lengua dispone de denominaciones como «depuración», «aleteo», «equipo», «limpieza».
Cada nación debe estar orgullosa de la lengua que habla, debe cultivarla y desarrollarla, no menospreciarla. El préstamo siempre será útil cuando satisfaga una necesidad de comunicación, cuando la lengua que lo acoja en su seno no disponga de recursos propios. Esa es la verdadera y única función del préstamo.
Todo ser humano que nace en una determinada comunidad lingüística, con el tiempo, se apropia de la lengua que se habla en el medio en que se desenvuelve …
Por el Dr. Sergio Valdés Bernal
Secretario de la Academia Cubana de la Lengua
Investigador titular del Instituto de Literatura y Lingüística
Profesor titular adjunto de la Facultad de Artes y Letras, Universidad de La Habana
Prólogo a la segunda edición de El lenguaje en la medicina. Usos y abusos del Lic. Rodolfo Alpízar Castillo
En: Del lenguaje. Publicado el sep 16th, 2014.
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