Los expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), cuyo enfoque es la salud humana, dicen que el riesgo de una pandemia es bajo.
No obstante, como medida de precaución, la agencia envió a los fabricantes de medicamentos muestras del virus que podrían formar la base de las vacunas para las personas, acotó la fuente.
Añadió que los CDC también exploran si los fabricantes de pruebas comerciales similares a las que se usan para el SARS-CoV-2 estarían dispuestos a desarrollarlas para el H5N1, el patógeno que provoca la influenza aviar.
La entidad, en asociación con los departamentos estatales y locales de salud pública, monitorean a las personas susceptibles de contraer la enfermedad.
Hasta la semana pasada, 6315 personas habían sido examinadas y uno dio positivo, según el doctor Tim Uyeki, director médico de la división de influenza de los CDC.
De acuerdo con el reporte, también los funcionarios del Departamento de Agricultura federal, responsable de la salud de los animales de granja, declararon que comenzaron a probar posibles vacunas avícolas e iniciaron conversaciones con líderes de la industria sobre un programa de inmunización a gran escala contra la gripe aviar para aves de corral.
Fuente: Prensa Latina