En las Américas, la violencia interpersonal, los traumatismos causados por el tránsito y los suicidios son las tres principales causas de muerte en esta población. La depresión está entre las tres primeras causas de enfermedad y discapacidad.
El informe sobre salud para los adolescentes del mundo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que la violencia interpersonal, las heridas por siniestros viales y el suicidio son las tres principales causas de muerte entre los adolescentes de 10 a 19 años de las Américas. La depresión es una de las tres primeras causas de enfermedad y discapacidad en este grupo en la región.
El documento muestra que mientras la mayoría de los adolescentes están sanos, muchos de ellos tienen problemas de salud que requieren una seria atención del sector de la salud. Brindar más atención a esos problemas específicos no sólo evitaría muertes y enfermedades, sino también mejoraría la salud de la población a lo largo de su vida, en particular si se abordan las condiciones y los comportamientos que se inician o se refuerzan en la adolescencia.
La atención prestada a la salud de los adolescentes en todo el mundo es insuficiente, afirmó Flavia Bustreo, subdirectora general de la OMS para la Salud de la Familia, la Mujer y el Niño. Esperamos que este informe contribuya a centrar la atención de las altas instancias en las necesidades de salud de los adolescentes de entre 10 y 19 años, así como que sirva de trampolín para acelerar la adopción de medidas relacionadas con la salud de los adolescentes, consideró.
Las Américas ocupa el cuarto lugar entre las seis regiones de la OMS en términos de mortalidad adolescente (77,5 por 100.000 en 2012), debajo del promedio global (110,7) y después de África (282,5), el Mediterráneo Oriental (118,3) y Asia Sudoriental (102,3). Sólo Europa (57,4) y el Pacífico Occidental (43,6) tienen tasas de mortalidad adolescente más bajas que las Américas. En 2000, esta tasa para las Américas era de 81,9 por 100.000.
Las principales causas de muerte han cambiado poco entre 2000 y 2012: la violencia interpersonal, las heridas por siniestros viales, los suicidios, el ahogamiento y la infección de las vías respiratorias bajas se ubicaron en los cinco primeros lugares. La violencia interpersonal está entre las cinco causas de muerte entre los adolescentes mayores de todas las regiones de la OMS.
La tasa de mortalidad de adolescentes varones es considerablemente más alta que la de las mujeres. Mientras la violencia interpersonal (37,21 por 100.000) es la principal causa de mortalidad entre los varones, entre sus pares mujeres lo son las heridas por accidentes de tránsito (5,84). Entre las cinco principales causas de muerte entre las mujeres aparece en el quinto lugar las condiciones maternas.
La asesora regional de Salud del Adolescente de la OPS, Matilde Maddaleno, consideró en el informe que la salud sexual y reproductiva es un punto a tener en cuenta en la región, especialmente en lo que respecta a la planificación de los embarazos.
Fuente: OPS
En: NotiWeb, Propuestas del editor.
El ejercicio físico como medida no farmacológica para la HTA, es decir aquel ejercicio, principalmente al aire libre, que dure alrededor de 30 a 45 minutos y consista en caminar o trotar, bailar , nadar y montar bicicleta, a una velocidad que permita cumplir con el tiempo antes mencionado, es lo ideal.
Ahora bien, la realización de ejercicios con pesas en el adolescente hipertenso no controlado, está contraindicada y puede ser peligrosa. Incluso, los preadolescentes y adolescentes deben evitar el deporte de levantamiento de pesas, «fisiculturismo» y esfuerzos máximos hasta completar su madurez física y esquelética.
Vea más infomación en el sitio de hipertensión en el adolescente.
En los niños y adolescentes con asma es preciso realizar una serie de procedimientos para su óptima atención y estas actividades, consensuadas con todos los profesionales que los atienden en el Programa del Asma, han de quedar registradas. Por esta razón surge el documento Normas de Buena Práctica Clínica (NBPC) que puede facilitar la obtención de unos indicadores útiles, tanto a los clínicos para medir su grado de desarrollo, como a los gestores sanitarios encargados de evaluar la calidad de la actividad asistencial generada en torno a los mismos, con independencia del plan de trabajo que se realice en cada consulta de Pediatría de Atención Primaria.
Las NBPC que deben figurar en la historia clínica de todo niño o adolescente con asma incluido en un programa de atención a esta patología son las siguientes:
- Evaluación de la gravedad y/o grado de control del asma.
- Estudio de la función respiratoria
- Estudio de la sensibilización alérgica
- Medidas de control ambiental
- Revisión del tratamiento farmacológico
- Revisión de la técnica de inhalación
- Educación terapéutica y plan de acción
Fuente: Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria
M.T. Muñoz Calvo, pediatra del Servicio de Endocrinología del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, de Madrid, propone esta guía de atención a pacientes con ginecomastia puberal, publicada en la revista Adolescere.
Esta afección es el crecimiento glandular uni o bilateral en varones en fase de desarrollo puberal. En el 50-60% se presenta algún grado de ginecomastia, principalmente en los estadios III y IV de Tanner. Esta amplia variabilidad es debida a variaciones étnicas, a las edades, y estadios de desarrollo sexual de los adolescentes estudiados, y sobre todo en los criterios establecidos para definirla. Existen diferencias raciales, y se ha reseñado una menor frecuencia en la raza negra respecto a la blanca.
La conversión extraglandular de andrógenos plasmáticos mediante aromatización en músculo, grasa y piel, es la fuente principal de estrógenos en el varón. La ginecomastia puberal se asocia con una proporción elevada del cociente . También podría intervenir en estrógenos/andrógenos su producción un aumento de la sensibilidad de la glándula mamaria a unos valores normales de estradiol.
ADOLESCERE. Revista de Formación Continuada de la Sociedad Española de Medicina de la Adolescencia. Volumen XXII. Ene/Feb 2013. Nº 1
Fuente: SEMA
En el 3er Congreso Virtual de Psiquiatría Interpsiquis 2002, el Profesor Titular de Psicopatología Héctor S. Basile, presentó este trabajo donde se describen recursos para la atención temprana de la depresión: identificar los grupos de riesgo juvenil, los perfiles de personalidad vulnerables, los métodos de diagnóstico precoz y los métodos de prevención desde la comunidad.
La depresión infantil y la de los adultos tienen manifestaciones diferentes que dificultan su correcto diagnóstico, debido a los procesos del desarrollo que existen en la niñez y la adolescencia. Para realizar el diagnóstico temprano de depresión en el niño es necesario, evaluar su edad y desarrollo, su nivel de madurez emocional, su situación familiar, y su autoestima. El mayor riesgo de la depresión es el intento suicida, especialmente doloroso en un niño o un adolescente. De allí la necesidad del diagnóstico precoz que posibilite prevenirlo.
El término trastorno depresivo no lo utilizaremos para referirnos a ciertos momentos tristes experimentados durante la vida, sino a un trastorno que afecta al desarrollo del niño o al adolescente e interfiere con su progreso madurativo psicológico y social.
El diagnóstico “depresión” puede corresponder a un síntoma, un sindrome, un grupo de respuestas psicológicas o una enfermedad psicopatológica. Lo que diferencia un síntoma de un trastorno es la duración e intensidad de la respuesta (como la tristeza). Por ejemplo, un niño puede estar triste como reacción a un trauma, y la tristeza puede durar poco tiempo.
El trastorno depresivo se caracteriza por una respuesta de larga duración y está asociado con el insomnio, la irritabilidad, los cambios en los hábitos alimentarios y los problemas en la escuela y con los amigos. Siempre que una problemática no desaparezca, se debe considerar la posibilidad que el niño padezca un trastorno depresivo.
Fuente: Alape
National Guideline Clearinghouse ofrece una actualización de los criterios apropiados de enfermedad respiratoria aguda en pacientes inmunocompetentes, definida con uno o más de estos síntomas: tos, producción de esputo, dolor en el pecho, y/o disnea (con o sin fiebre), según el American College of Radiology.
National Guideline Clearinghouse 2014 Apr 22:47676
Revise otros criterios en el sitio temático sobre asma de nuestra red de portales y sitios de salud.
La resiliencia es la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y sobreponerse a ellas. Los niños y adolescentes resilientes responden mejor al contacto con otros seres humanos y generan más respuestas positivas en las otras personas. Son además, más activos, flexibles y adaptables aún en la infancia.
Este componente incluye cualidades como la de estar listo para responder a cualquier estímulo, comunicarse con facilidad, demostrar empatía y afecto, y tener comportamientos prosociales. Como resultado, los niños resilientes, desde muy temprana edad, tienden a establecer más relaciones positivas con los otros.
El enfoque de la resiliencia parte de la premisa que nacer en la pobreza, así como vivir en un ambiente psicológicamente insano, son condiciones de alto riesgo para la salud física y mental de las personas. Más que centrarse en los circuitos que mantienen esta situación, la resiliencia se preocupa de observar aquellas condiciones que posibilitan el abrirse a un desarrollo más sano y positivo. Desde la década del ochenta en adelante, ha existido un interés creciente por conocer aquellas personas que desarrollan competencia a pesar de haber sido criadas en condiciones adversas, o bien en circunstancias que aumentan el riesgo de presentar psicopatologías. Este grupo de personas ha sido denominado como resiliente.
El vocablo resiliencia tiene su origen en el idioma latín, en el término resilio que significa volver atrás, volver de un salto, resaltar, rebotar. El término fue adaptado a las ciencias sociales para caracterizar aquellas personas que, a pesar de nacer y vivir en situaciones de alto riesgo, se desarrollan sicológicamente sanos y exitosos.
Durante la década del 70 ganó popularidad el concepto de niño invulnerable, con el que se aludía a algunos niños que parecían constitucionalmente tan fuertes, que no cedían frente a las presiones del estrés y la adversidad. No obstante, este concepto resultaba confuso y, según lo afirma Rutter (1985), equivocado por al menos tres razones: la resistencia al estrés es relativa, no absoluta, en tanto no es estable en el tiempo y varía de acuerdo a la etapa del desarrollo de los niños y de la calidad del estímulo. Las raíces de la resistencia provienen tanto del ambiente como de lo constitucional, el grado de resistencia no es estable, sino que varía a lo largo del tiempo y de acuerdo a las circunstancias. Por estos motivos, en la actualidad se utiliza preferentemente el concepto de resiliencia.
Les invitamos a conocer más sobre este tema, en la Organización Mundial de la Salud.
El 17 de abril, en la sede de la Representación de la Organización Panamericana de la Salud en Cuba, se dieron a conocer los resultados del concurso de dibujo infantil «Lucha contra los Vectores». Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo del Dr. José Luis Di Fabio, representante de la OPS/OMS, quien habló a los niños y demás participantes que el 7 de abril de cada año, el mundo celebra el Día Mundial de la Salud y que ese día, en todos los rincones del planeta, cientos de acciones señalan la importancia de cuidar la salud para llevar una vida productiva y feliz.
El personal de la Representación acompañó el acto mientras niños de la Escuela de Música Manuel Saumel nos deleitaron con algunas piezas musicales. Un ambiente de intercambio sobre el tema se produjo entre niños y adultos al término de la jornada.
Fuente: OPS Cuba
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