Ántrax en Tanzania

El 11 de enero de 2019, el Ministerio de Salud de Tanzania (MOHCDGEC, por sus siglas en inglés) informó un presunto brote de ántrax en el distrito de Momba, región de Songwe, ubicada en la parte occidental del país. El evento fue informado inicialmente a las autoridades sanitarias locales el 3 de enero de 2019 por un líder de la comunidad en el barrio de Nzoka. Sin embargo, la investigación epidemiológica estableció que el brote comenzó el 9 de diciembre de 2018 cuando el caso índice, una mujer de 70 años de la aldea Nzoka, desarrolló la enfermedad y murió más tarde en la comunidad. El 10 de diciembre, una niña de 13 años de la misma aldea desarrolló una enfermedad similar y posteriormente murió en la comunidad. Un grupo de casos similares ocurrió eventualmente entre el 24 de diciembre de 2018 y el 7 de enero de 2019, dos de los cuales murieron (uno en la comunidad y el otro al llegar a una instalación de salud). La mayoría de los casos presentaron hinchazón y ulceración en diferentes partes del cuerpo. Se obtuvieron especímenes de las lesiones de la piel de cuatro pacientes iniciales y se analizaron en el Hospital Vwawa (el hospital de referencia para la región de Songwe). De estos, dos mostraron bacilos grampositivos en la tinción de Gram, apuntando a un diagnóstico probable de ántrax. Se obtuvieron siete muestras de sangre y se enviaron al laboratorio nacional para su posterior análisis. Los resultados de la prueba informados el 17 de enero de 2019 por el Laboratorio Veterinario de Tanzania en Dar es Salaam indicaron que 3 de los 7 especímenes fueron positivos para Bacillus anthracis por reacción en cadena de la polimerasa.

Hasta el 17 de enero de 2019, se reportó un total de 81 casos humanos de ántrax, incluyendo 4 muertes (tasa de letalidad del 4,9%). No ha habido nuevos casos desde el 7 de enero de 2019. Las edades de los casos van desde 1-75 años, con una mediana de 25 años. Las mujeres son las más afectadas, representando el 54% de los casos reportados. La mayoría de los casos son agricultores y ganaderos. Los casos se originaron en cuatro asentamientos diferentes en la aldea de Nzoka (Chipanda, Nzoka, Kanyimbo y Manyolo).

El brote de ántrax en humanos fue precedido por la muerte de 16 cabezas de ganado desde noviembre de 2018, y según informes la comunidad consume y/o manipula sus cadáveres. El equipo veterinario recogió un ejemplar de una vaca muerta el 11 de enero de 2019 y la muestra fue enviada al Laboratorio Veterinario Zonal de Iringa; el resultado está pendiente.

Fuente: Organización Mundial de la Salud