En la actualidad, el suicidio es una de las principales causas de muerte, especialmente entre los adolescentes, y su tasa supera la tasa de homicidios, en la Argentina y en otros países. Más de 800 000 personas mueren cada año por suicidio, y esta es la segunda causa principal de muerte entre personas de 15 a 29 años de edad.
El doctor Héctor Basile, miembro de la Red Mundial de Suicidólogos, se ha referido al tema en diversas ocasiones y escenarios, y sostiene que se trata de una muerte prevenible. Según sus declaraciones, cuando alguien se suicida, este hecho afecta, además, a por lo menos, otras seis personas en promedio de su entorno. Y, cuando ocurre en una institución educativa o en el lugar de trabajo, puede afectar a cientos de ellas. Por otra parte, «las discapacidades derivadas de intentos de suicidio constituyen el 1,8% de la carga mundial de enfermedades, equivalente al efecto de guerras y homicidios, también de acuerdo con datos provenientes de la OMS».
En un curso virtual de psicología y psicopatología del niño, el adolescente y su familia, el Dr. Basile profundizó en el tema del suicidio de los adolescentes en Agentina. El mayor riesgo de la depresión en el adolescente es el intento suicida. El sexo masculino predomina sobre el femenino (proporción de 3 ó 4 a 1) y los rangos de edades más afectados son 10 a 14 años, 15 a 19 años y de 20 a 24 años.
Existen determinadas psicopatologías que pueden desembocar en tentativas de suicidio, como la depresión asociada a la desesperanza y la falta de expectativas. Pero también pueden incidir enfermedades mentales severas como la esquizofrenia y los trastornos bipolares.
Otros aspectos de gran incidencia en la conducta suicida son las perturbaciones del ambiente familiar, factores ambientales y sociales, determinados perfiles psicológicos y determinadas distorsiones cognitivas. Los trastornos de la personalidad y el trastorno por estrés postraumático crónico, también deben ser tenidos en cuenta.
Entre las condicones y motivaciones que conducen a los adolescentes al suicidio se encuentran el no sentirse valorado; la incapacidad de los padres y otros adultos significativos para imprimir sentimientos de aprobación y aceptación en el adolescente; la pérdida de un ser querido; la incapacidad de autoperdonarse; la falta total de autoestima; enojos y deseos de venganza, entre otros.
Existen factores de riesgo que aumentan la posibilidad en los adolescentes de cometer suicidio:
Trastornos psiquiátricos
Desequilibrio en los transmisores neuronales
Pobres habilidades para resolver problemas
Violaciones sexuales
Trastornos en la identidad sexual
Adicción a las drogas
Divorcio de los padres
Desempleo, problemas sociales
Acceso a armas de fuego
Ampliar la información:
Preventing suicide. A global imperative. World Health Organization 2014
El síndrome del ovario poliquístico (SOP) es una afección común en mujeres adolescentes y adultas. Ocurre cuando los ovarios o las glándulas suprarrenales femeninas producen más hormonas masculinas de lo normal. Las mujeres también producen, además de estrógeno (la principal hormona femenina), una pequeña cantidad de testosterona (la principal hormona masculina). Uno de los resultados del SOP es el desarrollo de quistes (cavidades llenas de líquido) en los ovarios. Leer más…
Los accidentes son la causa principal de muerte en adolescentes en Cuba (Anuario estadístico. Cuadros 34 y 35) y entre ellos, los accidentes de tránsito (Anuario estadístico. Cuadros 53 y 54). Muchos jóvenes comienzan a conducir a esa edad, generalmente bajo supervisión de los padres. Los adolescentes involucrados en accidentes del tránsito, bien por ser víctimas directas o bien por cometer imprudencias en la via, también corren el riesgo de no asumir con madurez la responsabilidad de estar detrás del volante. Ya sea en motocicletas, autos o incluso, utilizando bicicletas para trasladarse en la vía pública, deben tenerse en cuenta normas y conductas para evitar accidentes lamentables.
En estos casos los padres pueden desempeñar una función importante para reducir los riesgos y mantener a salvo a sus hijos adolescentes. Ser un ejemplo a seguir, conocer las regulaciones viales vigentes, establezcer reglas y controles, castigar cuando sea necesario, mantener el auto en buenas condiciones y saber tomar las decisiones correctas aunque no sean las deseadas, son consejos válidos propuestos por los especialistas de HealthyChildren.
La esperanza de vida de los niños con enfermedades graves ha mejorado significativamente y el aumento de la longevidad de los niños con enfermedades crónicas ha dado lugar a un incremento de los adolescentes que tienen estas dolencias y, en consecuencia, a un crecimiento de la demanda de servicios hospitalarios para este grupo de población. Sin embargo, el grado de adaptación de los servicios hospitalarios a las necesidades de los pacientes adolescentes es escaso y los adolescentes están subrepresentados en la investigación sobre hospitalización y servicios de salud.
El objetivo general de este trabajo fue realizar una aproximación a los modelos efectivos de atención hospitalaria no psiquiátrica que reciben los adolescentes en los hospitales españoles. En concreto, se pretendía conocer si los hospitales españoles cuentan con unidades de ingreso no psiquiátrico específicas para pacientes adolescentes, qué parámetros de edad utilizan estas unidades, las enfermedades que atienden y qué servicios educativos y de ocio se ofrecen a los pacientes ingresados en estas.
Se realizó un estudio descriptivo mediante encuestas llevadas a cabo en 73 hospitales, de los cuales en 68 se admitían ingresos de menores de edad.
El cuidado de los adolescentes en los hospitales españoles: los pacientes invisibles. A.M. Ullán, R. González Celador, P. Manzanera. Revista de Calidad Asistencial. 2010; Vol. 25. Núm. 03.
Se realizó un estudio descriptivo y transversal de 29 adolescentes (de 10 a 19 años) con gastropatías, diagnosticadas por medio de la endoscopia del tracto digestivo superior y el resultado de la biopsia, quienes fueron atendidos en la consulta de Gastroenterología del Policlínico Norte ¨Alberto Nito Ortega¨ del municipio de Palma Soriano, en Santiago de Cuba, de enero del 2012 a junio del 2013, con vistas a caracterizar la enfermedad desde los puntos de vista clínico, endoscópico e histológico, para lo cual se consideraron las variables: edad, sexo, síntomas y signos predominantes, factores de riesgo y diagnóstico definitivo.
Los resultados de la casuística se organizaron en distribuciones de frecuencias, con el empleo de las medidas de tendencia central y de dispersión para resumir las variables cuantitativas, y del porcentaje para las cualitativas; asimismo, predominaron el sexo masculino, los adolescentes de 14 a 16 años, los consumidores de agua no potable y de bebidas alcohólicas, así como los diagnósticos de pangastritis eritematosa erosiva, gastritis crónica antral y Helicobacter pylori.
Suárez Borges Maribel, Goide Linares Elio, Rodríguez Kuan Yaiseng, Martínez Casero Ana del Pilar, Nillar Vásquez Judith. Caracterización clinicoendoscópica e histológica de las afecciones digestivas en adolescentes. MEDISAN. 2014 Mar ; 18(3): 356-360.
Es imposible estar siempre de acuerdo con todo. Nuestra individualidad se expresa precisamente cuando tenemos criterios y puntos de vista propios, que unas veces coinciden con los de los demás y otras veces no. El hecho de ser seres sociales nos obliga a convivir con acuerdos y desacuerdos, y la manera más saludable de enfrentar esta situación es desde el respeto a los demás y a uno mismo. La adolescencia es una etapa de la vida donde esta conducta es el plato fuerte de cada día.
Unas veces, mostramos desacuerdo de manera impropia, y hasta violenta; otras sencillamente no nos atrevemos a mostrar nuestro desacuerdo para no generar discusiones o situaciones desagradables. Pero la verdad es que no tiene por qué ser siempre así.
En el sitio KidsHealth, se proponen 5 maneras de lidiar con el desacuerdo con respeto y constructivamente: no hacer de ello algo personal, aceptar que pueden haber otros criterios válidos, utilizar frases en primera persona, escuchar a la otra parte y mantener la calma, son consejos a tener en cuenta para una buena convivencia.
¿Cuáles son las principales regulaciones ambientales en el país? ¿Cómo se cumplen? ¿Son efectivas? ¿Qué medidas se toman para combatir indisciplinas? Miles de años de saqueo, desde las horas del descubrimiento y la colonización, hasta poco más de la década del 50 del pasado siglo, marcaron los principales problemas ambientales a los que el país ha tenido que enfrentarse en etapas más recientes. Pero la solución a estos azotes o carencias resulta un proceso lento y largo, y para lograrlo se requiere no solo la voluntad estatal, sino también educación y conciencia social, recursos y legislaciones competentes, junto a mecanismos que permitan ponerlas en práctica.
De acuerdo con lo establecido por la Constitución Cubana es deber de los ciudadanos contribuir a la protección del agua, la atmósfera, la conservación del suelo, la flora, la fauna y de todo el uso potencial de la naturaleza.
Los principales problemas ambientales identificados en Cuba son:
- La erosión y otras afectaciones del suelo (mal drenaje, salinidad, compactación, desertificación)
- El deterioro del saneamiento y las condiciones en asentamientos humanos
- La contaminación de las aguas interiores y costeras por falta de control de las fuentes contaminantes
- La deforestación
- La pérdida de biodiversidad
El espacio Soy Cuba, dialoga con la licenciada Vivian Hernández Torres, presidenta de la Sección de Derecho Ambiental de la Sociedad Cubana de Derecho Constitucional y Administrativo acerca de estas y otras interrogante.
Este es un país con una fuerte vocación ambiental. En el año 1976 cuando se promulgó la Constitución, en su artículo 27 se hacía referencia, con un lenguaje propio de la época, a la necesidad de proteger el medio ambiente. En el año 1992, cuando se realizó la Reforma Constitucional, hacía pocos días se había celebrado la Cumbre de Río de Janeiro y fuimos el primer país de Latinoamérica que introdujo en su «ley de leyes» el concepto de desarrollo sostenible. Consecuentemente con esto, la Ley 33 de 1980 promulgaba la protección del medio ambiente y los recursos naturales.(…) No son legislaciones perfectas, pero evidencian la preocupación y la voluntad real del Estado Cubano. Todavía queda muchísimo por hacer, sobre todo en materia de conciencia y de recursos disponibles. Hay personas que teniendo un cesto al lado echan papeles en la calle, y no hay quién los multe por hacerlo. En ocasiones usted camina varias cuadras y no encuentra dónde botarlo. Falta además información y educación. Cuando compras una pila para un equipo, por ejemplo, debería decir en un letrero que no se debe votar con el resto de la basura, pero no lo dice. Y así muchísimos casos más.
Este es uno de los países que tiene mejores resultados en la reducción de sustancias que dañan la capa de ozono, hemos renovados gran cantidad de equipos contaminantes. Tenemos también logros importantes en la reforestación. (…) Para proteger el medio se necesitan tres cuestiones fundamentales: una fuerte voluntad política, capacidad técnica para hacerlo bien y recursos para poder lograrlo. Creo que la última es la que más nos entorpece.
Fuente: Soy Cuba. Mayo 26, 2014
En este artículo se presenta el caso clínico de un paciente de 13 años de edad, quien había sido operado en el primer año de vida como consecuencia de un lipomeningocele. En esta ocasión acudió al Hospital General Docente Dr. Juan Bruno Zayas Alfonso de Santiago de Cuba, donde se le diagnosticó, mediante resonancia magnética, una imagen hiperintensa en T1 y T2 en región lumbar, intrarraquídea, adosada al filum terminal, de posible origen graso.
Se le realizó secuencia de supresión de grasa (STIR) y se definieron 2 malformaciones congénitas: lipoma lumbosacro y síndrome de médula anclada.
El síndrome de médula anclada, en el que el cono medular está fijado por debajo de L1-L2, se observa en 10% de los casos después de la intervención quirúrgica del mielomeningocele. Entre las malformaciones vertebrales que lo acompañan figuran: diastematomielia, lipomeningocele, espina bífida oculta, cifoescoliosis congénita o adquirida, costillas bífidas, costillas adicionales, espondilolisis, espondilolistesis, lipoma del filum y filum terminal corto y engrosado. Este último se define como el agrandamiento del filum en 2mm o más. Estos 2 hallazgos del filum terminal usualmente se ven en combinación, pero en algunos casos pueden ocurrir individualmente.
Diagnóstico de lipoma lumbosacro y síndrome de médula anclada mediante resonancia magnética en un adolescente. Espinosa Creagh Yanet, de la Cruz de Oña Andria, Pons Porrata Laura María. MEDISAN vol.18 no.3 Santiago de Cuba mar. 2014
Los lectores comentan