¿Adicciones tecnológicas en los más jóvenes?
Si en el siglo XX los comentaristas hablaban de una brecha digital, enfocada a la línea económica y que aún existe, la brecha digital del siglo XXI dicen los investigadores va más allá, pues separa a los padres de los niños.
El tema implica en sí mismo más de una reflexión, pues en tanto hoy nuestros hijos son nativos digitales —ya que desde pequeños consumen y desarrollan formas de pensar y entender el mundo influidas por el entorno de las nuevas tecnologías— se trata de un asunto esencial.
Algunos de los estudios dirigidos en el mundo a la interacción entre niños y adolescentes con las llamadas Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) reflejan que, por ejemplo, a los dos años el 40 % de los niños ya “trastea” con facilidad el móvil o la tableta para jugar o ver dibujos animados. A los ocho, el 72 % ya maneja las nuevas tecnologías y en el caso de los adolescentes entre 10-15 años, la cifra asciende al 80 %.
Son estas apenas algunas pinceladas de un fenómeno que más de un experto en el tema ha descrito como el peligro de “niños enganchados y padres desconectados”, y que nos muestra ese nuevo mundo del adolescente adicto a la tecnología, cuyas patologías cibernéticas, como el aumento de la agresividad o el aislamiento, se pueden prevenir desde la comunicación parental.
Asimismo, alertan las investigaciones, está emergiendo un nuevo tipo de desadaptaciones conductuales producto de la generalización de las TIC. Si bien estas herramientas fueron creadas como tecnologías para informar y comunicar, su propio diseño es susceptible de afectar a la voluntad de control, lo cual junto con otros factores personales y ambientales, facilita la conducta adictiva. [Por: Lisandra Fariñas Acosta]
Fuente: Periódico Granma. 24 de abril de 2016
Los lectores comentan