Crisis febril como manifestación inicial de COVID-19
El objetivo del presente artículo fue interpretar la presencia de crisis febril simple en pacientes admitidos en servicios de urgencia pediátricos como manifestación inicial de COVID-19.
La COVID-19 es una enfermedad que ha mostrado una baja morbilidad y mortalidad en pediatría. Las crisis febriles constituyen una de las causas más frecuentes de admisión en los servicios de urgencia y de interconsultas con el neuropediatra.
Presentación del caso: Paciente femenina de un año de edad, con antecedentes de salud anterior que acude al cuerpo de guardia con fiebre de 38 ℃ y crisis motora, de inicio generalizada, tónico-clónica, que cedió con medidas antitérmicas. Por protocolo se realiza punción lumbar la cual resulta negativa.
Se ingresa, 24 horas después comienza con manifestaciones catarrales, se hace otoscopia y se diagnostica una otitis media aguda, por lo que se inicia tratamiento antibiótico. Se realiza la prueba de reacción en cadena de la polimerasa para la COVID-19 con resultado positivo, por lo que se remite para el Hospital Pediátrico “San Miguel del Padrón”.
Los autores concluyen que se debe sospechar la presencia de COVID-19 ante paciente que acude a servicio de urgencias por una crisis febril, como único problema de salud. LA COVID-19 es una enfermedad que ha demostrado que se puede presentar de diversas formas.
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Comentarios realizados
Joven cubana @ 11:18 am
Que bueno conocer todos estos signos de alerta de esta enfermedad que se ha convertido en una “gran simuladora” por sus diferentes formas de presentación. Soy médico avileña, mis padres y yo tuvimos COVID 19. Mi papá de 72 años fue la fuente de infección en casa porque a pesar de su edad aún trabaja, mi papá inició con diarreas y un síndrome febril que se prolongó, mi mamá de 69 años solo tos húmeda escasa y febricula y yo rinitis y febricula. Debemos sospechar la COVID ante cualquier dolor aparentemente muscular que simula ser de origen cardiovascular o renal, exacerbación de las manifestaciones respiratorias en los alérgicos, fiebre de origen aparentemente desconocido, cuadros diarreicos o de vómitos y el resto los síntomas clásicos como tos seca, cansancio, perdidas de gusto y olfato etc.