El misterio no resuelto: las infecciones asintomáticas de COVID-19

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pueblo cubanoLa existencia de infecciones asintomáticas de COVID-19 ha sido claramente documentada y en diferentes series se ha estimado que pueden representar hasta 30% a 40% de infectados por SARS-CoV-2.

Sin embargo, aún nos hace falta conocer el verdadero impacto de las infecciones asintomáticas de COVID-19, sin duda, uno de los aspectos más misteriosos e inquietantes de la enfermedad.

La red Medscape comenta sobre este tema.

Actualmente no hay una definición estandarizada de infecciones asintomáticas de COVID-19, pero en múltiples estudios se definen como aquellas que se presentan en sujetos que nunca desarrollan síntomas durante el curso de la enfermedad; deben ser diferenciados de pacientes presintomáticos que no tienen síntomas al momento del diagnóstico, pero los desarrollan a través del tiempo.

Sabemos que las personas con infección asintomática pueden transmitir COVID-19, aunque no tenemos un estimado de qué tanto contribuyen a los brotes de la enfermedad. En un metanálisis recientemente publicado se incluyeron 13 estudios con 21.708 personas, y se evidenció que hubo 42% menos riesgo relativo de transmisión de la enfermedad de sujetos asintomáticos, en comparación con los sintomáticos.

Esto probablemente asociado al hecho de que al no tener síntomas no tosen o estornudan, por lo que no generan gotas ni aerosoles en grandes cantidades como los sujetos sintomáticos y, por tanto, la transmisión de la enfermedad es teóricamente menor. Conocer la frecuencia con que los pacientes asintomáticos contagian SARS-CoV-2 es de gran interés, ya que en la mayoría de los países estas infecciones asintomáticas no se detecta, porque las pruebas se realizan en su mayoría a sujetos sintomáticos.

En las últimas semanas, conforme avanzan los programas de vacunación contra la COVID-19 alrededor del mundo, estamos ganando experiencia y conocimiento acerca de cómo la vacunación planea disminuir el número de sujetos enfermos y de hospitalizaciones. Sin embargo, hasta el momento no sabemos si las vacunas van a disminuir a los portadores asintomáticos también.

Desafortunadamente, en el estudio de fase 3 de las vacunas de Pfizer y de Moderna solamente se realizó prueba de reacción en cadena de la polimerasa de hisopado nasofaríngeo a sujetos que desarrollaban síntomas, por lo que hasta hoy no sabemos si las vacunas previenen infección asintomática.

Sin embargo, en el estudio de la vacuna de Oxford/AstraZeneca sí se realizaron pruebas de reacción en cadena de la polimerasa de hisopado nasofaríngeo una vez por semana, y se evidenció que la vacuna disminuyó la tasa de infección asintomática en 59%; esperamos que este resultado de gran relevancia pueda ser extrapolado en el futuro a otras vacunas contra la COVID-19.

A pesar de que actualmente hay entendimiento en expansión acerca de los portadores asintomáticos y de que tenemos evidencia preliminar de que la transmisión del virus de sujetos asintomáticos es menor, representan un riesgo, porque sabemos que los sujetos vacunados contra la COVID-19 están protegidos para desarrollar la enfermedad, pero desconocemos si las vacunas de Pfizer y de Moderna también evitan la transmisión del virus, por lo que debemos continuar con el uso de mascarillas, lavado de manos y distancia física de otras personas, tengan síntomas o no de COVID-19.

Fuente: El misterio no resuelto: las infecciones asintomáticas de COVID-19 – Medscape – 22 de feb de 2021.

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