Sexo y vacunas, a tener en cuenta
El desarrollo de vacunas y la implementación de ensayos clínicos se han acelerado enormemente, pero aún carecen de la visión estratégica del diseño y evaluación pues lo inmediato es dar detener la infección. Las respuestas a la vacunación pueden variar ampliamente entre individuos en función de factores como la edad, el microbioma, las comorbilidades y el sexo.
Este último aspecto ha recibido cada vez más atención en los últimos años y un creciente número de datos proporciona evidencia de que los efectos específicos del sexo pueden conducir a diferentes resultados de seguridad y eficacia de la vacuna. Dado que estas diferencias podrían tener un impacto significativo en el régimen de vacuna óptimo resultante, las diferencias basadas en el sexo ya deberían considerarse e investigarse en ensayos clínicos y preclínicos.
El sitio web Inmunología de nuestra red, propone esta esta revisión donde los autores destacan las observaciones clínicas de las diferencias específicas derivadas del sexo en respuesta a la vacunación, delinean las diferencias de sexo en los mecanismos inmunitarios y discuten las posibles implicaciones resultantes para el desarrollo de candidatos a vacunas contra infecciones emergentes.
A medida que se prueban múltiples vacunas candidatas contra COVID-19 que se dirigen al mismo antígeno, el desarrollo de la vacuna puede sufrir un cambio decisivo, ya que ahora tenemos la oportunidad de comprender mejor los mecanismos que influyen en la reactogenicidad inducida por la vacuna y la eficacia de diferentes vacunas.
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