Meta-análisis: asociación entre la humedad en interiores, el moho y el riesgo de rinitis

Association of indoor dampness and molds with rhinitis risk: A systematic review and meta-analysis

Jaakkola MS, Quansah R, Hugg TT, Heikkinen SAM, Jaakkola JJK.

J Allergy Clin Immunol 2013;132:1099-110.

La asociación entre la humedad en interiores, el moho y el riesgo de rinitis

600px-20100815_1818_mold1Los alergenos respiratorios de origen fúngico se consideran importantes en la etiología del asma y la rinitis. No obstante, su papel pudiera haberse subestimado en los últimos años y algunos estudios epidemiológicos que han abordado esta asociación han mostrado resultados contradictorios. En este artículo de revisión, recientemente publicado por la revista Journal of Allergy and Clinical Immunology se aborda el problema a partir de un meta-análisis y revisión sistemática de una serie  de estudios publicados. Se estima así el riesgo relativo de rinitis con relación a la exposición a la humedad en interiores o a la presencia visual de moho.

Es conocido que las condiciones de humedad en las habitaciones, así como las marcas o manchas de filtraciones en paredes o techos son condiciones que propician la proliferación del moho. Se suele suponer que el problema de la alergia al moho es más importante en los climas cálidos y húmedos donde la exposición al mismo y la humedad puede alcanzar al 30% de la población, no obstante, el problema no parece despreciable incluso en los países de clima más frío donde también son apreciables las marcas de humedad en las construcciones habitacionales.

Aunque el asma se considera la manifestación alérgica más preocupante, la rinitis (coriza) también afecta considerablemente la calidad de vida del paciente, impide su desempeño social y causa gastos sociales sustanciales por concepto de medicamentos y servicios de atención a la salud. Además, se considera a la rinitis como un predecesor del desarrollo del asma o un agravante de la misma. Esta revisión sistemática realizada por científicos fineses de la Universidad de Oulu abarcó el análisis y procesamiento de los resultados de 31 publicaciones sobre rinitis, rinitis alérgica o rino-conjuntivitis.

De acuerdo a los autores, el estudio refuerza la evidencia de que el riego de rinitis se incrementa ante la exposición a la humedad en el hogar y la presencia de moho. El mayor riesgo se asoció con el llamado “olor a humedad” (en realidad olor a moho) y alcanza una razón de riesgo (RR) de 2.18 para la rinitis y de 1.87 para la rinitis alérgica, o sea, hay casi 2 veces más probabilidad de que suceda la enfermedad en los pacientes expuestos a estas condiciones con respecto a los no expuestos. La razón de riesgo fue también elevada y estadísticamente significativa para la presencia visible de moho en las habitaciones (RR=1.82-1.51), sin embargo las marcas de humedad, (por ejemplo, en paredes y techos) no representaron un riesgo estadísticamente significativo y los resultados en ese sentido no fueron homogéneos entre las diferentes publicaciones analizadas.

Los autores sugieren que el hecho de que el mayor riesgo se asocie con el olor a moho puede indicar que la presencia de este olor sea un marcador de una exposición más intensa y de una conexión directa (física o química) entre la fuente alergénica y la mucosa nasal a través de aerosoles o partículas aerotransportadas (posiblemente las esporas). La mayor parte de los datos proviene de estudios transversales y no de estudios de cohorte, de modo que la relación causa-efecto es difícil de apreciar. La estimación de la exposición fue realizada mediante encuestas a los pacientes y solo en pocos casos mediante apreciación de inspectores especializados. En general los autores consideran que los pacientes tienden a subestimar el problema de la humedad y el moho en el hogar cuando se compara con los datos colectados por personal especializado o por mediciones de esporas fúngicas en el polvo. Por lo tanto, el asunto pudiera estar incluso subestimado en términos de su importancia real  como problema de salud.

Un estudio similar, publicado anteriormente por estos mismo autores (1) había determinado el efecto de la exposición al moho y la humedad, sobre el desarrollo del asma. En el mismo se detectó un gradiente creciente en la magnitud de la asociación, partiendo de la presencia de marcas o manchas de agua en paredes a la exposición a humedad y, alcanzando un valor máximo, con relación a la presencia visible de moho y el olor característico. En el estudio actual, la magnitud del efecto de la asociación con rinitis fue aun mayor que en el estudio previo para asma, aunque un gradiente claro en dependencia del tipo de exposición, no fue observado. No obstante, el olor a humedad o moho se comportó como el factor más fuerte asociado a la rinitis, de la misma forma que lo reportado para el asma, anteriormente.

En general, la revisión refuerza la concepción de la importancia de los aeroalergenos fúngicos no solo para el asma sino también para la rinitis, aunque queda abierta la estimación de la influencia de otros factores concurrentes con la humedad como los alérgenos de ácaros y otros productos químicos. Queda clara una vez más la evidencia que sustenta la necesidad de aplicar medidas para controlar o prevenir los problemas de humedad y contaminación con moho. Estas medidas serían potencialmente efectivas en lograr la prevención o la reducción de la rinitis y el asma alérgica.

(1)   Quansah R, Jaakkola MS, Hugg TT, Heikkinen SA, Jaakkola JJ. Residential dampness and molds and the risk of developing asthma: a systematic review and meta-analysis. PLoS One 2012;7:e47526.

Por Alexis Labrada, DrC