Vacunación Bacille Calmette-Guérin (BCG) y COVID-19

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vacunaNo hay evidencia de que la vacuna Bacille Calmette-Guérin (BCG) proteja a las personas contra la infección con el virus COVID-19. Hay dos ensayos clínicos que abordan esta cuestión y la OMS evaluará la evidencia cuando esté disponible. En ausencia de evidencia, la OMS no recomienda la vacuna BCG para la prevención de COVID-19.

No obstante, la OMS continúa recomendando la vacunación neonatal con BCG en países o entornos con alta incidencia de tuberculosis.

Existe evidencia experimental de estudios en animales y humanos de que la vacuna BCG tiene efectos no específicos sobre el sistema inmune. Estos efectos no se han caracterizado bien y se desconoce su relevancia clínica.

El 11 de abril de 2020, la OMS actualizó su revisión de evidencia en curso de las principales bases de datos científicas y repositorios de ensayos clínicos, utilizando términos de búsqueda en inglés, francés y chino para COVID-19, coronavirus, SARS-CoV-2 y BCG.

La revisión arrojó tres preimpresiones (manuscritos publicados en línea antes de la revisión por pares), en los que los autores compararon la incidencia de casos de COVID-19 en países donde la vacuna BCG se usa con países donde no se usa y observaron aquellos países que rutinariamente usaron el la vacuna en neonatos tuvo menos casos reportados de COVID-19 hasta la fecha.

Dichos estudios ecológicos son propensos a sesgos significativos de muchos factores que generan confusión, incluidas las diferencias en la demografía nacional y la carga de enfermedad, las tasas de prueba para las infecciones por el virus COVID-19 y la etapa de la pandemia en cada país.

La revisión también arrojó dos protocolos registrados para ensayos clínicos, los cuales tienen como objetivo estudiar los efectos de la vacuna BCG administrada a los trabajadores de la salud directamente involucrados en la atención de pacientes con COVID-19.

La vacunación con BCG sí previene las formas graves de tuberculosis en los niños y la desviación de los suministros locales podría provocar que los recién nacidos no se vacunen, resultando en un aumento de la enfermedad y la muerte por tuberculosis.

En ausencia de evidencia, la OMS no recomienda la vacuna BCG para el prevención de COVID-19. La OMS continúa recomendando la vacunación neonatal con BCG en países o entornos con alta incidencia de tuberculosis.

Tomado de: Bacille Calmette-Guérin (BCG) vaccination and COVID-19. WHO Scientific Brief – 12 abril 2020

Comentarios realizados Comentar

19/04/2020

Migdely @ 12:05 am #

Bsjajajabana

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