M. Florencia Etcheverry et al. Vaccine 29 (10): February 2011, 1855-2004
Ser capaz de reclutar voluntarios de alto riesgo que estén dispuestos a considerar la participación futura en ensayos de vacunas es una característica crítica de los estudios de preparación de vacunas. En este trabajo se describen los datos de dos cohortes de usuarios de drogas, inyectables y no inyectables, de alto riesgo de infección por VIH / VHC en Barcelona, España (Centro de la Cruz Roja) y en San Francisco, EE.UU., (estudio UFO-VAX), para evaluar el comportamiento de la exposición al riesgo y la voluntad de participar en futuros ensayos vacuna preventiva contra el VIH. Hemos logrado identificar poblaciones de usuarios de drogas que serían elegibles para los futuros ensayos clínicos de eficacia de la vacuna contra el VIH, basándonos en niveles reportados de riesgo durante la evaluación y altos niveles de voluntad de participar. En ambos grupos, la Cruz Roja y OVNI-VAX respectivamente, la infección por el VHC es altamente prevalente al inicio del estudio (41% y 34%), la seroprevalencia del VIH de referencia fue del 4,2% y 1,5%, y se vieron altos niveles de disponibilidad (el 83% y 78% ).
Ampliar la información en inglés. El artículo está disponible a texto completo en Hinari para los usuarios de Infomed.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) actualizaron el 27 de enero de 2011 la informacion sobre estadísticas y prevención del cáncer de cuello uterino.
Virtualmente, todos los cánceres de cuello uterino son causados por el virus del papiloma humano (VPH). El VPH es un virus común que se propaga con facilidad por el contacto epitelial durante la actividad sexual con otra persona infectada. Hay muchos tipos de VPH. Algunos tipos pueden ocasionar cambios en el cuello uterino de la mujer que con el paso del tiempo pueden convertirse en cáncer, mientras que otros pueden causar verrugas genitales.
El VPH es tan común que la mayoría de las personas lo contraen en algún momento de su vida, en particular después de una infección, y por lo general no causa síntomas, por lo cual usted no sabrá si lo tiene. En la mayoría de las mujeres, el VPH desaparece por sí solo; sin embargo, si esto no ocurre, es posible que con el tiempo cause cáncer de cuello uterino u otros cánceres y no hay manera de saber si una persona con el VPH padecerá cáncer u otros problemas de salud.
El cáncer de cuello uterino es prevenible debido a que se dispone de pruebas de detección (para detectar problemas en el cuello uterino tan pronto comiencen) y vacunas (para prevenir infecciones por el VPH). Cuando el cáncer de cuello uterino se detecta en sus etapas iniciales, sus posibilidades de tratamiento son muy altas y está asociado a una larga supervivencia y buena calidad de vida. Las mujeres que han recibido la vacuna de todos modos necesitan hacerse las pruebas de detección del cáncer de cuello uterino (prueba de Papanicolaou).
Los CDC recomiendan que todas las niñas entre los 11 y 12 años de edad reciban las tres dosis (inyecciones) de la vacuna contra el VPH para protegerse contra el cáncer y precáncer de cuello uterino. Las niñas y las mujeres jóvenes entre los 13 y 26 años deben recibir las tres dosis de la vacuna contra el VPH si no han recibido todas las dosis. La vacuna se puede administrar a niñas de 9 años de edad. Los niños y hombres jóvenes de 9 a 26 años de edad también pueden recibir la vacuna contra el VPH para prevenir las verrugas genitales.
El cáncer cervical es uno de los procesos malignos sida -relacionados más comunes en Tailandia. Este estudio reconoce que las infecciones de HIV tienen un predominio más alto, incidencia, persistencia y progresión de las lesiones intraepiteliales comparado con aquéllas sin la infección.