Una nueva terapia basada en las células madre, creada por Cellonis Biotechnologies (China), podría ser empleada por un equipo de médicos chinos para eliminar, por primera vez en la historia, el glioma o cáncer cerebral de un paciente noruego de 36 años en Pekín. Este nuevo tratamiento sugiere que las futuras vacunas de terapias podrían dirigirse a las células madre con cáncer. Este tratamiento, dentro de una Terapia de Cáncer Completa (CCT), fue desarrollado por un grupo de investigadores chinos en Pekín, en combinación con los tratamientos convencionales de cáncer y la Medicina Tradicional China (TCM) y las terapias celulares. Ha demostrado que el sistema inmune activado puede eliminar de forma directa las células madre del tumor y las células hijas con cáncer. Antes, los científicos pensaban que los tumores eran bultos de tejidos de cáncer que debían eliminarse o destruirse completamente para curar a los pacientes. Sin embargo, en los últimos años, han aprendido que las células madre con cáncer (CSCs), que componen una pequeña población de células, parecen ser las responsables del inicio, mantenimiento y recaída de los tumores malignos. Incluso si se consigue eliminar por completo un tumor, este se regenerará desde las CSCs supervivientes, haciéndose más resistente al tratamiento. Las actuales terapias, incluyendo las celulares, generalmente no hacen frente a las CSCs. Esto permite a las CSCs sobrevivir hasta después de los tratamientos de quimioterapia y radiación. La eliminación de estas células es una estrategia prometedora para eliminar los tumores y prevenir su crecimiento posterior. Según destacó la profesora Lily Shum, PhD, responsable científica de Cellonis, las CSCs podrían explicar “por qué los tratamientos comunes, sobre todo la quimioterapia, no son suficientes para eliminar los tumores”. “De hecho, a pesar del desarrollo de los nuevos agentes quimioterapéuticos, los tumores cerebrales se pueden desarrollar y seguir siendo resistentes a estas terapias”, concluyó. Fuente: Madrid, enero 1/2010 (Europa Press) |
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Toronto (Canadá), (EFE).- Investigadores canadienses dijeron hoy que China se ha colocado en quinto lugar a nivel mundial en medicina regenerativa y que las autoridades chinas tienen planes para reinar sobre decenas de clínicas que ofrecen de forma incontrolada terapias de células madre.
Los investigadores del Centro McLaughlin-Rotman de Sanidad Global de la Universidad de Toronto también señalaron que las autoridades chinas están invirtiendo grandes cantidades de recursos y reclutando científicos de gran calibre educados en el exterior del país.
De esta forma, sólo Estados Unidos, Alemania, Japón y el Reino Unido superan en este momento a China en contribuciones científicas en el campo de medicina regenerativa.
La investigadora Dominique McMahon, una de las autoras del estudio, declaró a Efe que la apuesta de China por la medicina regenerativa y técnicas de células madre es consecuencia del creciente envejecimiento de su inmensa población y su preocupación por el futuro coste sanitario que esto supondrá para el país.
Halla Thorsteinsdóttir, otra de las autoras del estudio que se publicó hoy en la revista “Regenerative Medicine”, explicó a Efe que aunque en los países occidentales se tiene la imagen que “China es como el salvaje oeste” en referencia a la proliferación de clínicas con terapias de células madre, “esa no es toda la historia”.
“Hay una gran confusión internacional sobre sus investigaciones. Lo cierto es que hay muchas clínicas que utilizan técnicas controvertidas porque no está probado que esas terapias funcionan. Pero también hay centenares de investigadores publicando sus trabajos en revistas científicas”, afirmó Thorsteinsdóttir.
Según el estudio canadiense, las contribuciones chinas a revistas científicas en materia de células madre ha pasado de 37 en el 2000 a 1.116 en el 2008.
Además, el país está empezando a elaborar nuevas normas para controlar los tratamientos utilizados en unas 200 clínicas de todo el país y que han generado un creciente y lucrativo turismo médico de pacientes procedentes de países occidentales.
El doctor Peter Singer, director del Centro McLaughlin-Rotman y que también participó en el trabajo, señaló que “cuando se estudia el campo de células madre en China, se observa el Yin-Yang de una potencia científica mezclada con la controvertida aplicación clínica de terapias de células madre”.
La medicina regenerativa es un campo concentrado en la reparación, reemplazo o regeneración de células, tejidos u órganos para restablecer funciones.
Las clínicas chinas en el campo ofrecen terapias de células madre para lesiones traumáticas cerebrales y espinales, diabetes, Parkinson, múltiple esclerosis, autismo y otras enfermedades aunque la supuesta efectividad de los tratamientos no están confirmados por pruebas clínicas.
Por ejemplo, Beike Biotechnology es uno de los principales centros de terapia del país que dice haber tratado a unos 5.000 pacientes, entre ellos 900 extranjeros, con inyecciones de células madre en el fluido espinal.
Pero junto con estas prácticas cuestionables, los investigadores chinos han conseguido notables avances en el campo de las células madre, señalaron los investigadores canadienses.
Por ejemplo, China ha creado al menos 25 líneas de células madre embrionarias humanas, cuatro de ellas de un tipo especializado que en su momento sólo otros dos países en todo el mundo habían conseguido desarrollar.
Thorsteinsdóttir explicó que gran parte del éxito de China en el campo es fruto de la política gubernamental de atraer científicos chinos educados en el extranjero.
“Me asombró que casi todos los principales investigadores chinos de medicina regenerativa habían sido educados en lo Estados Unidos y el Reino Unido. Esta es una política que otros países con escasez de recursos humanos deberían considerar”, dijo Thorsteinsdóttir. EFE
jcr/av
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Tomado de Juventud Rebelde. Escrito por
Mileyda Menéndez Dávila mileyda@juventudrebelde.cu
Eyda Dávila digital@juventudrebelde.cu
Mientras la primera pandemia de gripe en 40 años (provocada por el virus A (H1N1), resultaba para la revista Nature lo más notable de la ciencia en 2009, su colega Science otorgó tal categoría a la descripción de fósiles del Ardipithecus ramidus, especie homínida que vivió hace 4,4 millones de años en lo que hoy es Etiopía.
El hallazgo (mantenido en discreto estudio durante 15 años) quitó el puesto a «Lucy» —el esqueleto parcial más antiguo de un homínido registrado hasta entonces— y acercó las investigaciones aún más al último antepasado común compartido por humanos y chimpancés.
«Ardi», la nueva superabuela, cambió la manera de pensar la evolución humana temprana: tras estudiar cráneo, dientes, pelvis, manos, pies y otros huesos, 47 científicos de nueve naciones determinaron que poseía una mezcla de rasgos «primitivos» similares a sus predecesores —los simios de la época del Mioceno— y rasgos «derivados» que compartía exclusivamente con homínidos posteriores.
Sin embargo, varias de sus características no aparecen en simios africanos de la época moderna, por lo que es probable que chimpancés y gorilas hayan evolucionado ampliamente desde que compartimos ese último ancestro común y resulten pobres modelos para entender nuestra propia evolución.
Al elegir los diez sucesos científicos más importantes de 2009 según su parecer, las revistas Science y Nature coincidieron solo en uno: la presencia de agua en la Luna, confirmada en noviembre por la agencia espacial estadounidense NASA cuando los sensores de la sonda LCROSS detectaron señales de agua congelada, al parecer en grandes cantidades, justo antes de impactar en un cráter conocido como Cabeus, en el polo sur de nuestro satélite natural.
Sin embargo, ambas publicaciones dejaron fuera la noticia del agua potable contenida en los polos de Marte: una capa de unos tres millones de kilómetros cúbicos que contiene tanto hielo como agua líquida.
Favoritos de Science en la rama de la astronomía fueron la colocación de nuevos lentes al telescopio espacial Hubble para prolongar su vida útil otros cinco años, y la misión conjunta de EE.UU. Alemania, Francia, Italia, Japón y Suecia para identificar nuevas clases de púlsares, lo cual amplía el conocimiento sobre las singulares emisiones de rayos gamma de estas estrellas de neutrón, altamente magnetizadas y de rápida rotación.
Science destacó también el mapa tridimensional detallado de la Vía Láctea elaborado por un equipo norteamericano, gracias al cual se constató que nuestra galaxia es un 15 por ciento más grande y un 50 por ciento más densa que Andrómeda, y no al revés como se pensaba. Su velocidad de giro es de unos 914 000 kilómetros por hora y su masa total es una vez y media más grande de lo estimado antes de este mapa, que además fue proyectado en el tiempo, algo no hecho nunca antes.
Sin embargo, a pesar de las perspectivas que el universo ofrece, es posible que EE.UU. detenga los vuelos tripulados, porque un informe gubernamental concluyó que la NASA no tiene recursos suficientes para lograr sus planes, incluyendo el regreso a la Luna en 2020.
Desafíos saludables
En el ámbito de la salud, la revista Science dio relevancia a la Rapamicina, primer fármaco inmunosupresor que prolonga la vida de un mamífero, probado en ratones con 600 días de edad (más o menos el equivalente de una persona de 60 años) a quienes alargó su vitalidad en un 28 por ciento los machos y un 38 por ciento las hembras. De poder extrapolar los resultados, la Rapamicina aumentaría la expectativa de vida siete años a los hombres y diez a las mujeres.
Igualmente destacó el éxito de usar células madre de los propios pacientes (modificadas con un gen corrector y transportadas con un virus para invadir con eficacia todo el organismo) con el fin de frenar la adrenoleucodistrofia en tres niños españoles, enfermedad hasta ahora mortal.
Fuera de las listas quedó la creación de una cámara y cinturón que procesa señales de video y las envía sin cables a un implante ubicado en la retina, los cuales ayudaron a 32 personas que perdieron la vista a volver a ver, no solo contornos de objetos, sino incluso pequeñas letras, reportó el sitio 20 minutos.
Otra esperanza del siglo es la terapia regenerativa para reemplazar órganos dañados. La Universidad de Ciencias de Tokio insertó células madre con ciertas «instrucciones» en las mandíbulas de roedores que les hicieron crecer dientes completos y funcionales, con una dureza comparable a la de los naturales, y fibras nerviosas capaces de responder al dolor, pero pintados de verde para detectarlos con facilidad.
Por su parte el Imperial College de Londres experimentó con una combinación de fármacos que acelera los mecanismos de recuperación del cuerpo ante daños severos cuando esa capacidad llega a su límite, por ejemplo debido a problemas cardiacos, huesos rotos o enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoidea.
Universo interior
En marzo de 2009, un equipo japonés logró medir con tecnología de exploración magnética funcional diferencias sutiles en los patrones de actividad cerebral de la corteza visual de dos individuos y reflejaron en la pantalla las imágenes que estos veían, logro que nos acerca a la capacidad de leer la mente humana y los sueños.
Paralelamente los franceses lograron registrar actividad cerebral correspondiente al proceso consciente de lectura de palabras en epilépticos que llevaban implantados electrodos en lo más profundo del cráneo. Así establecieron cuatro marcadores que diferenciarían la conciencia de la no-conciencia, lo que podría ayudar a buscar señales conscientes en personas con daño cerebral.
La Universidad de Colorado, en tanto, desarrolló un atlas de los microbios que colonizan el cuerpo humano: unos cien millones de millones sobre o dentro del organismo, algunos con funciones fisiológicas importantes, por lo que definir lo normal en una persona sana ofrece líneas de base para analizar a personas enfermas, reportó la BBC Ciencia.
Apuestas al manofuturo
Como la fuente de luz más complicada jamás creada catalogó Science en 2009 al primer láser de rayos X, herramienta capaz de tomar instantáneas de reacciones químicas en desarrollo, alterar las estructuras electrónicas de los materiales y realizar gran número de experimentos en varios campos científicos, pues permite estudiar la estructura atómica de cristales, metales, polímeros y otros materiales con una precisión nunca vista.
Science privilegió en su lista también al uso experimental del grafeno, material formado por láminas de átomos de carbono de alta conducción (diez veces más rápidos que los chips de silicio), y no dejó de mencionar los imanes ingleses de un solo polo (monopolos), existentes solo en los llamados cristales de hielo de espín, que son capaces de alinearse para dejar pasar una corriente magnética similar a la electricidad.
En el inventario de Nature apareció el acelerador de partículas LHC instalado cerca de Ginebra, el de más alta energía del mundo, que superó al veterano Tevatron de Fermilab, en Chicago, EE.UU. El LHC logra colisiones de partículas a 2,36 teraelectronvoltios (TeV), pero sus aspiraciones de diseño son de siete TeV por haz.
Romper récords es también el destino del Buckypaper creado por el Instituto de Materiales de Alto Desempeño de EE.UU., aunque nadie lo incluyó en listas. A simple vista parece papel carbón, pero tiene una fuerza 500 veces superior al acero y es diez veces más ligero, al estar conformado por pequeños nanotubos de carbón, reporta Ctnoticias.
Sí aparece como hito científico el nanorrobot australiano con un diámetro de 250 nanómetros (de dos a tres cabellos) destinado a operar cerebros. Se controla mediante ondas de una potencia de dos a tres vatios (como un teléfono móvil) y es lo suficientemente fuerte para avanzar a contracorriente en los vasos sanguíneos a partir de la zona del cuello.
En el anonimato quedaron el primer microrrobot canadiense que levita y es capaz de manipular objetos para aplicaciones a microescala, como ensamblar componentes, manipular muestras biológicas o hacer microcirugía, y los robots que la NASA proyecta para preparar el terreno en la Luna y construir en esta una base permanente.
También se avanza en nanoestructuras capaces de movilizar las capacidades curativas del cuerpo para reparar o regenerar tejidos y órganos, con resultados alentadores en males como el Parkinson o el Alzheimer y en la recuperación de funciones del corazón tras un infarto.
Para no quedar atrás, Harvard logró «fabricar» un ribosoma, factoría de proteínas de las células, paso que sigue al primer cromosoma artificial logrado en 2008: uno a uno se tratan de recrear los mecanismos de la vida para fabricarla de manera sintética, lo cual permitiría, entre otras posibilidades, producir aceite vegetal como biocombustible limpio.
En la universidad inglesa de York mejoraron la sensibilidad de las técnicas de resonancia magnética para que una imagen pueda observarse en una fracción de segundo, dando un nuevo uso al magnetismo del parahidrógeno, combustible de los transbordadores.
El Instituto de Tecnología de Georgia logró convertir energía mecánica de los organismos en energía eléctrica para alimentar varios dispositivos electrónicos a partir de vibraciones de baja frecuencia, como el latido cardiaco y los movimientos del cuerpo y el viento al desplazarse.
Igual propósito persiguen en Copenhague los autores de una rueda capaz de almacenar en una batería la energía cinética liberada cuando el ciclista frena y devolverla en forma de empuje extra cuando quiere ganar velocidad o subir una cuesta. El dispositivo tiene un sistema GPS y sensores que registran la posición y las rutas recorridas, analizan la calidad del aire, cuentan los kilómetros o reciben informes sobre el tránsito, información que puede compartirse con otros ciclistas. No menos originales son la tecnología alemana del zapato que puede crecer hasta dos centímetros al ritmo de los pies infantiles, ya probado en más de 10 000 niños; la confección de mantas en Portugal a partir de botellas de plástico recicladas, la cerveza japonesa elaborada en una estación espacial y el cigarrillo electrónico que lanza vapor de agua con nicotina en lugar de humo y alquitrán, de modo que el adicto no deja de fumar, pero al menos no daña su organismo ni molesta a los demás.
De cara al cambio climático, Science dio relevancia al equipo internacional a cargo de la síntesis de un émulo del ácido abscísico (ABA), hormona vegetal que presiente tiempos difíciles y procura adaptarse a condiciones de estrés para aumentar sus posibilidades de supervivencia.
La idea es rociar los cultivos con este producto para aumentar su tolerancia a condiciones medioambientales adversas como la sequía. No obstante —por si las moscas— también se experimenta con árboles electrónicos para salvar al mundo: una especie de purificadores de aire artificiales que pueden sustituir en su función a unos 1 200 árboles, suficientes para que respiren 20 000 personas al día, según reporta el sitio Ecoinventos.
Curiosamente Nature enlistó como sucesos claves del año el millar de correos electrónicos cursados entre climatólogos ingleses que fueron expuestos al público por hackers para probar el alcance del calentamiento global, y el reciente fracaso de la cumbre del clima en Copenhague.
Es imposible reflejar todos los adelantos de 2009 en un solo artículo. En materia de ciencia, cada año de este milenio equivaldrá a décadas del siglo pasado, noticia que pudiera ser buena si no estuviera signada por el contraste, pues diariamente se revelan tantas cosas novedosas como personas mueren por causas fácilmente evitables como hambre, guerras, frío, sustancias tóxicas, accidentes…
Por eso Nature remarca la disyuntiva que enfrentan muchos gobiernos: o congelar las investigaciones por la crisis financiera o dar a la ciencia su lugar como motor de la economía y financiar proyectos y universidades. Finalmente, EE.UU. aprobó 14 600 millones de euros; Alemania decidió invertir 18 000 millones; Francia prometió gastar 19 000 millones, y Japón asignó 12 550 millones de euros para tecnologías de bajo carbono.
Claro que ese dinero es para desarrollo propio o convenios con otras naciones poderosas. Las inversiones, donativos y transferencias a instituciones científicas del Tercer Mundo siguen recortándose. Tal vez después de colonizar la Luna las grandes potencias se acuerden de sus coterráneos menos ricos que quedaron en su propio planeta.
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Publicado el 11-01-2010 , por A. Gómez. Madrid en Expansion.com
El sistema español de donación y trasplante de órganos es uno de los motivos de ‘orgullo patrio’ de las autoridades sanitarias. No es para menos: en 2009, España superó los 1.600 donantes con los que se realizaron 4.000 trasplantes, una cifra con la que revalida, por decimoctavo año consecutivo, su liderazgo mundial en este campo.
Los máximos han sido históricos en injerto renal (2.328) y pulmón (219). Y otro récord: el pasado 28 de marzo, se realizaron 32 trasplantes con órganos procedentes de 13 donantes, un operativo que fue coordinado por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) y en el que intervinieron 23 hospitales, ocho Comunidades Autónomas, siete aeropuertos civiles y militares y sies compañías aéreas.
Lo que sí ha cambiado es el perfil del donante, que ya no se corresponde con el de un joven fallecido por accidente de tráfico. El año pasado, el 45% de los donantes había superado los 60 años de edad y el 64% había muerto a causa de una hemorragia cerebral y sólo el 8,7% en accidente de carretera.
En cuanto a la lista de espera, el director de la ONT, Rafael Matesanz, indicó ayer que “hay 5.400 personas en espera de un órgano (el colectivo más numeroso es el de riñón), un dato que es muy positivo porque la población aumenta mientras que la lista de espera disminuye”. En cuanto a los tiempos, oscilan entre los dos meses para el corazón y los 20 meses del riñón.
El cirujano plástico Pedro Cavadas también ha entrado en el ránking de los trasplantes al realizar el octavo injerto mundial de cara y el primero en incluir lengua y mandíbula. El paciente, cuya identidad no ha trascendido, “esta verdaderamente encantado”, subrayó Matesanz.
Durante la presentación de los datos, la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, explicó que de los 37 millones de dosis adquirida de vacuna contra la gripe A, “sólo se han servido 13 millones de dosis, de los que nueve se han repartido entre las Comunidades Autónomas y el resto pertenece a la reserva estratégica”.
Jiménez aseguró que cuando se adquirieron las dosis de vacunas, el Gobierno acordó con los laboratorios poder suspender parte del pedido, de forma que, finalmente, “de los 170 millones de euros presupuestados inicialmente para este fin, se han gastado 90 millones”.
La ministra dijo que, hasta ahora, tres millones de personas se han vacunado de la gripe A, y “seguimos insistiendo en que deberían hacerlo todas las personas que pertenezcan a grupos de riesgo, ya que los epidemiólogos no pueden descartar que este virus desplace al de la gripe estacional
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- Cloning Mice and Men: Prohibiting the Use of iPS Cells for Human Reproductive Cloning p16
- Bernard Lo, Lindsay Parham, Arturo Alvarez-Buylla, Marcelle Cedars, Bruce Conklin, Susan Fisher, Elena Gates, Linda Giudice, Dina Gould Halme, William Hershon, Arnold Kriegstein, Pui-Yan Kwok, Richard Wagner
- Will iPS Cells Enhance Therapeutic Applicability of Cord Blood Cells and Banking? p21
- Hal E. Broxmeyer
Una entidad sin fines de lucro y un laboratorio que fabrica bombas de insulina anunció el miércoles que planean unirse para desarrollar un “páncreas artificial”, que consistirá en un sistema de bombas y monitores para controlar la diabetes tipo 1.
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19.01.10 – 03:24 – LAURA FONSECA | GIJÓN. El Comercio
Este tipo de células se puede duplicar hasta 40 veces y se cree que interviene durante la gestación, protegiendo a la mujer embarazada.El material extraído a 130 gijonesas se guarda en incubadoras que reproducen las condiciones humanas
Tienen memoria y capacidad para duplicarse hasta 40 veces en poco tiempo. De una muestra milimétrica extraída del útero de una mujer pueden obtenerse, con el paso de las semanas, «kilos» de células en el laboratorio. Son las llamadas células madre uterinas, un valioso material con el que trabajan la Unidad de Investigación del Hospital de Jove y la empresa de biotecnología Projech, que intentan determinar el alcance real que éstas células tienen para tratar enfermedades degenerativas, como el parkinson o el alzheimer.
De momento, los estudios realizados por Projech y Jove han logrado establecer que este material, que proviene del útero de mujeres en edad fértil, muestra un gran potencial para regenerar tejidos dañados de cualquier tipo. Desde neuronas, hasta músculos, huesos o piel. Los promotores de la investigación se afanan ahora por conseguir financiación para poder continuar adelante con el proyecto y dar el salto a los ensayos en ratones.
Pero mientras las reuniones y conversaciones con instituciones, empresas y entidades bancarias del Principado se suceden, Jove continúa ‘fabricando’ nuevas remesas de células madre. Aunque la investigación está en punto muerto, a la espera de solventar el escollo económico, las incubadoras y neveras que Projech ha instalado en el hospital gijonés siguen dando renovados lotes celulares.
Pero, ¿cómo se obtienen estas células?, ¿qué proceso se sigue desde que son extraídas del cuello uterino hasta que son seleccionadas para su criopreservación? o ¿cuánto tiempo pueden sobrevivir una vez congeladas? El proceso de producción y conservación «es sencillo, ya que está todo muy protocolarizado», cuenta el director de Projech, Carlos Rodríguez. Lo primero es obtener la muestra de tejido, que se extrae del cuello del útero. «Es una técnica idéntica a la que se emplea para hacer una citología». Para realizar esta investigación, Jove utilizó células procedentes de 130 gijonesas en edad fértil, quienes aceptaron de forma voluntaria participar en el proyecto.
Entre 36 y 37 grados
Una vez retirado, el tejido se introduce en un material especial para su conservación y se guarda a una temperatura de cuatro grados centígrados. Posteriormente, la muestra es manipulada bajo unas mamparas donde se trabaja en situación de esterilización absoluta. Las células seleccionadas se depositan en un líquido nutriente y de ahí pasan a la incubadora que intenta reproducir las condiciones de temperatura y humedad uterinas: entre 36 y 37 grados centígrados. Se trata de una especie de útero artificial, explican los científicos.
En el plazo de dos semanas, nuevas células empiezan a aflorar en los cultivos de las incubadoras. Es cuando se inicia el proceso de multiplicación. «Se pueden duplicar hasta 40 veces», comenta Carlos Rodríguez, quien recuerda que este tipo de células «tienen memoria. Si las congelas cuando se han duplicado dos veces, tras la descongelación retoman el proceso de multiplicación donde lo dejaron».
Este experto en biotecnología asegura que «de una simple muestra se pueden obtener kilos de células madre uterinas». Rodríguez desconoce cuántas se almacenan actualmente en Jove, a donde Projech ha trasladado su sede social y su laboratorio. No obstante, a tenor de lo que exhiben las neveras e incubadores que hay en Jove, son muchos los cultivos celulares a disposición de los investigadores.
Otro aspecto que se estudia es qué papel juegan estas células durante el embarazo. Se cree, indica el director de la Unidad de Investigación del Hospital de Jove, el doctor Francisco Vizoso, que este tipo de material se duplica durante la gestación, ejerciendo un efecto protector. Eso explicaría por qué las mujeres embarazadas gozan de una protección natural ante un amplio abanico de enfermedades.
«Es hora de sumar»
En las últimas semanas, Rodríguez y Vizoso se han encargado de presentar el proyecto ante instituciones, organismos oficiales, bancos y asociaciones. Aunque el tiempo «corre en nuestra contra», ya que existe el riesgo de que la patente del descubrimiento acabe embargada, ambos confían en que la investigación pueda proseguir. Necesitan tres millones de euros para que el proyecto pase a la segunda fase (dos años de ensayos en animales), pero aclaran que con 200.000 euros «tendríamos para empezar y evitar que el trabajo se paralice». Vizoso prefiere ver el vaso medio lleno. «Es hora de sumar y no de restar», precisa. Como colofón insiste en que «lo más importante es que los resultados de la investigación lleguen a la cabecera del paciente lo más rápido posible».
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