Resultado de la búsqueda sobre: sífilis

La transmisión maternoinfantil del VIH y la sífilis no constituyen un problema de salud pública en Cuba, sin embargo se realizan acciones integrales específicas y diferenciadas de promoción de salud y prevención de estas entidades en las etapas del ciclo de vida para mantener los indicadores de salud. A pesar de los resultados alcanzados, persisten dificultades como son la necesidad de un enfoque más integrado y el perfeccionamiento de la calidad en los servicios, incluida la atención a los hombres.

Según datos demográficos, la edad media de la mujer cubana es de 38.79 años , 1.39 años más que la de los hombres (37.40). Dada la dinámica demográfica del país, entre los años 2000 y 2010 se ha reducido la población femenina en edad reproductiva en un 0.7% y disminución de la tasa de natalidad (reducción del 13.2%). Se mantienen por más de tres décadas, bajos niveles de reproducción, avanza el envejecimiento del patrón por edad de la fecundidad en el que se presenta, paradójica y desfavorablemente, una elevada fecundidad adolescente, la cual aumenta entre el 2000 y el 2011 en un 10.5 %.

Estrategia cubana

Fuente: MINSAP

La Estrategia Nacional de Prevención de la Transmisión Maternoinfantil del VIH y la Sífilis Congénita muestra un enfoque de salud pública, basada en la capacidad técnica y en la orientación programática. Perspectiva integrada en un entorno político, social, económico y jurídico favorable, con financiamiento específico, cobertura y calidad de servicios para niños, niñas, adolescentes, jóvenes, mujeres, hombres y la familia en general. Promueve la equidad de género y de derechos y cuenta con la participación activa de los gobiernos locales, agentes comunitarios, aliados de otros sectores, medios de comunicación y organizaciones sociales.

Bajo el liderazgo del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), a través del Departamento Nacional de Prevención y Control de ITS-VIH/sida y la corresponsabilidad en la gestión de la respuesta intra e intersectorial, la Estrategia Nacional de Prevención de la Transmisión Maternoinfantil del VIH y la Sífilis Congénita, inserta en el Programa de medicina familiar; propone lograr y mantener la eliminación de estas entidades en Cuba mediante el acceso universal a los servicios de prevención de ITS-VIH/sida con un enfoque centrado en sistemas integrados de salud.

Para lograr este propósito, se ha proyectado fortalecer el acceso y alcance a servicios salud sexual y reproductiva,  prevención de ITS-VIH/sida, atención al recién nacido, la salud familiar y comunitaria; potenciar la formación de capacidades; fortalecer el papel de los sectores y de la sociedad en la respuesta a la epidemia de VIH y otras ITS promoviendo los derechos humanos y la igualdad de género y desarrollar un plan de comunicación para la salud.

Fuente: Ministerio de Salud Pública de Cuba

sifilisLa sífilis es una infección bacteriana que se transmite por contacto sexual. Si no se trata, puede causar daño cerebral, de tejido y nervios. Puede provocar la muerte.

Causas

La sífilis es provocada por la bacteria Treponema pallidum , que se transmite mediante el contacto directo con una lesión sifilítica. El contacto puede ocurrir en las siguientes situaciones:

  • Contacto sexual vaginal, oral o anal con una persona infectada
  • Una mujer embarazada que transmite la infección al feto ( sífilis congénita )
  • Exposición sanguínea, como por uso de drogas, y rara vez, por transfusiones sanguíneas.

Factores de riesgo

Los factores que incrementan la probabilidad de padecer sífilis son:

  • Edad: entre 15 y 34
  • Tener sexo con una persona infectada con sífilis
  • Tener varias parejas sexuales
  • No usar un condón de látex durante las relaciones sexuales vaginales, orales o anales (en una relación que no es mutuamente exclusiva o cuando no se sabe si la otra persona padece sífilis)
  • Contacto con una lesión por sífilis
  • Padecer o haber padecido una enfermedad sexual

Artículo completo
Sífilis congénita

Fuente: Salud en Español. EBSCO

sifiilis_5

embarazo_cubaLa sífilis puede transmitirse verticalmente cuando la madre se encuentra en un estadio precoz, donde existe una alta concentración de treponemas en circulación y en menor porcentaje en la latencia tardía, donde la serología no treponémica puede negativizarse espontáneamente con persistencia de la serología treponémica. El control prenatal para sífilis se realiza habitualmente mediante una reacción no treponémica como VDRL o prueba rápida de reaginas en plasma (RPR) y, en caso de ser reactiva, se recurre a técnicas treponémicas como inmunofluorescencia indirecta con absorción (FTA-abs) y/o hemaglutinación (MHA-Tp). La prevalencia debe definirse en base a la positividad de las reacciones treponémicas. Para analizar la seroprevalencia y la validez de estas pautas de control se evaluaron con métodos serológicos treponémicos y no treponémicos 1056 embarazadas que concurrieron por primera vez al Hospital de Clínicas. De acuerdo a los resultados serológicos se dividieron en 4 grupos. El grupo I (n = 17 o 1.61%) presentó ambos tipos de pruebas reactivas, el grupo II (n = 22 o 2.08%) sólo presentó reactivas las pruebas treponémicas. Estos dos grupos fueron serorreactivos para sífilis. El grupo III (n = 7 o 0.66%) mostró reactivas sólo las pruebas no treponémicas, siendo considerados falsos biológicos positivos. De ellos, 5 presentaron anticuerpos antifosfolípidos. El grupo IV (n = 1.010 o 95.65%) no presentó evidencias serológicas de sífilis. En conclusión: 1) La seroprevalencia en esta población fue de 3.69%. 2) Dado que el 2.08% de embarazadas serorreactivas no hubieran sido detectadas con el tamizaje habitual.

Artículo completo

Fuente: SCielo

sifilis_congenitaEs bien reconocida la importancia del control de las infecciones de transmisión sexual (ITS) para reducir la frecuencia de la transmisión del VIH (1-4). Paradójicamente, el interés por las ITS no ha crecido en la proporción que supondría el reconocimiento de esa relación. Más aún, las respuestas institucionales ante las ITS han menguado frente a la gravedad de la epidemia de infección por VIH y sida, la cual está poniendo a prueba la capacidad de coordinación de los gobiernos, de los programas de salud y de las diversas organizaciones e instituciones nacionales e internacionales en todos los niveles.

Por otro lado, el énfasis excesivo en la expansión del tratamiento antirretroviral (ARV) podría estar quebrantando los esfuerzos por promover medidas preventivas para evitar la transmisión del VIH, que curiosamente coinciden con las medidas preventivas para evitar la transmisión de las ITS en general.

Según un estudio realizado en los Estados Unidos de América, la probabilidad de adquirir una ITS es mayor en las personas tratadas con antirretrovirales que en quienes no reciben este tratamiento (5). Cabe resaltar también que las lesiones dermatológicas que produce la sífilis facilitan la transmisión del VIH (3, 4). En países como Inglaterra, Francia, Estados Unidos y Alemania, la frecuencia de sífilis está aumentando principalmente en hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (HSH). Son características comunes a todas estas infecciones las prácticas sexuales sin protección —incluido el sexo oral—, el vínculo a redes sociales o sexuales de alto riesgo, el uso de drogas durante el coito y la coinfección por VIH (6–10). Cabe considerar esta situación como un preludio de lo que puede suceder en América Latina y el Caribe.

Aunque existen varios factores, principalmente políticos y económicos, que explican por qué se produce esta disociación entre las ITS y la infección por VIH, ella casi sin duda tiene un impacto sumamente adverso en la población en general. Así, los HSH no reconocen la necesidad de acudir periódicamente a realizarse pruebas para la detección (tamizaje) de ITS (4), ni el hecho de que el riesgo de contraer una ITS persiste a pesar de estar en tratamiento con ARV. Tampoco parece del dominio común el hecho de que la sífilis puede transmitirse en la práctica del sexo oral.

La sífilis sigue teniendo un impacto negativo en la Región. La aparición de casos de sífilis congénita pone de manifiesto deficiencias de orden tanto estructural como técnico en los servicios de salud. El objetivo del presente escrito es exponer ante los profesionales de salud de la Región el problema de la sífilis materna y congénita; analizar los factores que contribuyen a la persistencia de la enfermedad; y sensibilizarlos para que emprendan acciones encaminadas a eliminar la sífilis congénita en América Latina y el Caribe.

Artículo completo

Fuente: SCielo