Una novedosa técnica

Una novedosa técnica ideada por científicos de la Universidad de Cambridge podría cambiar la investigación y el uso de las células madre en medicina regenerativa. Su trabajo tendría aplicaciones directas en posibles tratamientos del hígado y el páncreas, dos órganos realmente importantes en nuestro organismo.

Los investigadores, liderados por el Dr. Nicholas Hannan, de la Universidad de Cambridge, han conseguido desarrollar una metodología en el laboratorio que les permite aislar las células madre del intestino proximal, conocidas en inglés como foregut stem cells. Una vez conseguidas, los científicos pudieron provocar su diferenciación en células hepáticas o pancreáticas, que luego pudieran ser utilizadas en terapias regenerativas.

La novedad de la metodología aplicada reside en que su técnica permitió aumentar significativamente el rendimiento del proceso de aislamiento y cultivo de estas células madre. De esta manera, consiguieron una cantidad clínicamente aceptable, y su producción podría incluso incrementarse mediante el uso de biorreactores especializados.La cantidad obtenida de células madre sería clínicamente aceptable.

Una vez que se pudieran producir estas células madre a gran escala, se podrían utilizar en medicina regenerativa, como herramienta para curar órganos o tejidos dañados, o incluso en el tratamiento de algunas enfermedades importantes, como la diabetes tipo I o diversos problemas hepáticos.

En palabras de Hannan, “han conseguido desarrollar un sistema de cultivo celular que permite el aislamiento específico de células madre del intestino proximal en el propio laboratorio”. El trabajo del equipo de Hannan, llevado a cabo en el Wellcome Trust MRC Stem Cell Institute de la Universidad de Cambridge, no podría haber sido posible sin la colaboración del grupo de investigación del Dr. Ludovic Vallier. Podrían usarse en medicina regenerativa o en el estudio del desarrollo embrionario.

Su logro, que ha sido publicado en la revista Stem Cell Reports, podría tener más aplicaciones además de las ya citadas en medicina regenerativa.

Y es que el aislamiento de las células madre del intestino proximal permitiría a los investigadores saber más sobre cómo se produce el desarrollo embrionario de órganos como el hígado, los pulmones, el páncreas o los intestinos.

Como explica Vallier, el protocolo que han conseguido desarrollar es un “mejor punto de partida para establecer en un futuro una plataforma eficiente con la que producir células hepáticas o pancreáticas”, lo que presenta evidentes aplicaciones clínicas a medio plazo. Su trabajo, sin duda, marca un punto de inflexión interesante en el trabajo con este tipo de células madre, y su uso futuro en el tratamiento de estos órganos.