Disminuye 70 por ciento la mortalidad por males respiratorios

México, 3 ene (Notimex) A pesar de que en invierno aumentan las enfermedades respiratorias, sobre todo entre niños, en las últimas dos décadas ha disminuido 70 por ciento la mortalidad derivada de estos padecimientos, aseguró la especialista Karina Huesca Gutiérrez.

La investigadora de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza de la UNAM explicó que 75 por ciento de los casos que se registran durante la temporada invernal entre niños, afecta principalmente a menores de cinco años.

Destacó que en el invierno alrededor de 80 por ciento de estos padecimientos son de tipo viral y que las entidades donde la población es más afectada son Puebla, Tlaxcala, Chihuahua y el Distrito Federal.

Los menores de dos años son más propensos a esos males, pues a esa edad se presentan con mayor frecuencia y severidad, sin embargo, ‘los bebés de menos de dos años pueden presentar complicaciones más graves, e incluso corren el riesgo de ser hospitalizados’, explicó.

Refirió que los síntomas de estas enfermedades son fiebre, tos, escurrimiento nasal, dolor de garganta y malestar general y si el cuadro es más complicado hay sibilancias (sonido silbante durante la respiración), y dificultad o ruidos anormales al respirar.

Huesca Gutiérrez alertó que si un niño presenta dificultad para respirar, lo hace muy rápido, se le hunden las costillas, tiene los labios morados, deja de comer, bebe pocos líquidos o está decaído, son síntomas de alarma y necesita hospitalización.

Para evitar esos síntomas, recomendó procurar alimentar al bebé con leche materna los primeros meses de vida, propiciar un adecuado estado nutricional y tener completo el esquema de vacunación.

Asimismo, mantener a los infantes alejados del humo del tabaco o leña, abrigarlos, no exponerlos a cambios bruscos de temperatura, y conservar ventiladas las habitaciones.

Los cuidados que se deben tener cuando el pequeño ya ha enfermado son alimentarlo e hidratarlo bien, controlar la fiebre, no automedicarlos y acudir a consulta, subrayó.

En general, dijo, es importante lavarse las manos antes de preparar los alimentos, de regreso a casa, después de ir al baño o de toser, cubrirse la boca al estornudar con el antebrazo o con un pañuelo.