agosto 2011 Archives

Urcelay Segura. Boletín de la Soc. Oftalmo. de Madrid – N.º 48 (2008)

En el momento actual, se acepta de forma casi generalizada el beneficio de la suspensión de la terapia médica antiglaucomatosa (fundamentalmente los derivados de las prostaglandinas) antes de cualquier procedimiento filtrante (trabeculectomía o esclerectomía no perforante). El mantenimiento de la terapia hipotensora hasta el momento de la cirugía puede conllevar una serie de efectos negativos, inhibir la producción de acuoso (betabloqueantes, alfa adrenérgicos, inhibidores de la anhidrasa carbónica), limitando el efecto filtrante o reduciendo el efecto mecánico de lavado que realiza el humor acuoso. También pueden  favorecer la inflamación (prostaglandinas, parasimpaticomiméticos) o actuar como desencadenante de otras complicaciones, como atalamia, sinequias, glaucoma maligno (parasimpaticomiméticos). Sin embargo, se mantiene una mayor controversia sobre al manejo de estos mismos fármacos antes y después de la cirugía de catarata.

N. Molina, E. Milla, E. Bitrian, C. Larena y L. Martínez. ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2010;85(10):325–328

La medición de la presión intraocular (PIO) es un procedimiento importante para el diagnóstico y seguimiento de pacientes con glaucoma. Existen varios factores que influyen en la medición de la PIO, entre ellos el grosor corneal central (CCT), la curvatura corneal y el método utilizado para su medición. La técnica más utilizada y de referencia para la medición de la PIO es la tonometría de aplanación de Goldmann (GAT). Sin embargo, una de las mayores limitaciones es la influencia del CCT en los valores que entrega. El GAT fue calibrado para un CCT de 520 m, por lo que existe una subestimación y una sobrestimación de la PIO en córneas delgadas o gruesas, respectivamente.

 

Benítez del Castillo. Boletín de la Soc. Oftalmo. de Madrid – N.º 48 (2008)
Los pacientes operados de lasik miópico tienen una disminución de la sensibilidad corneal que acompañaba a una disminución en el volumen lagrimal. Ambas alteraciones se normalizan entre los 6 y 9 meses. Esto se debe a que la secreción lagrimal es refleja y los nervios corneales se lesionan durante la cirugía por la acción del microqueratomo y el láser. ¿Por qué se altera la superficie ocular tras la cirugía refractiva corneal (lasik) y es reversible? ¿Que pruebas son necesarias para evaluar la superficie ocular antes de la cirugía? ¿Se puede realizar lasik en una enfermedad de la superficie ocular ya diagnósticada? A continuación algunas consideraciones del autor con respecto este tema que le ayudará a responder las interrogantes.

 

Martín Martínez (Madrid, 1684-1734) fue una de las figuras médicas más eminentes del siglo XVIII español (el siglo de la ilustración). Estudió Medicina en la Universidad de Alcalá de Henares, desde 1706 ocupó plaza en el Hospital General de Madrid y fue profesor de Anatomía, médico de cámara de Felipe V y presidente de la Regia Sociedad de Medicina de Sevilla. Se le considera una de las personalidades que promovieron la renovación del conocimiento médico en la España del setecientos, uno de los reformistas destacados que trataron de impulsar una modernización y regeneración del país que nos elevara al nivel de otras naciones europeas.

J.J. Barbón, A. Sampedro. La oftalmología en el Tratado de operaciones chyrurgicas de Martín Martínez. ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2010;85(3):120-122

L. López Guajardo, J. Benítez Herreros. ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2010;85(8):278 280

La fijación escleral de lente intraocular (LIO) a nivel de sulcus, se reserva para aquellos pacientes que no cuenten con soporte capsular adecuado. De esta forma, podrá indicarse en casos de subluxación de cristalino, rotura de cápsula posterior o desinserción zonular en la cirugía de cataratas, o subluxación/luxación de LIO previamente implantada. Otras técnicas descritas para la implantación de lentes en estos pacientes incluyen su colocación en cámara anterior, o suturadas al iris. No obstante, la cámara posterior ofrece una posición más anatómica, que conlleva menor riesgo de daño endotelial, estrechamiento de cámara anterior y glaucoma.


VC Lima, TS Prata, A Mehta, C Tello, J Liebmann, R Ritch1. Eye 2009 23, 2131 2132.

Paciente de 89 años con iridotomías láser por cierre angular en ambos ojos 20 años atrás, que después de extracción del cristalino e implante de LIO en ambos ojos comienza a quejarse de visión doble cuando cierra el ojo derecho.

 

 

Actualización en cirugía refractiva: Pasado, Presente y Futuro.
Mingo Botín, Blázquez Escudero. Boletín de la Soc. Oftalmo. de Madrid – N.º 48 (2008)
Los procedimientos ablativos corneales como el LASIK alteran la superficie ocular fundamentalmente a través de la hipoestesia corneal que inducen (más exactamente denominada epiteliopatía neurotrófica), mediante dos mecanismos. Por un lado, la pérdida de sensibilidad disminuye la secreción lagrimal, y por otro reduce la frecuencia de parpadeo, llevando a un ojo seco mixto, hiposecrector y evaporativo. El grupo del profesor Benítez del Castillo demostró la existencia de una marcada correlación entre el TFI (índice de función lagrimal: Schrimer bajo anestesia dividido por tasa de aclaramiento de la lágrima) y la sensibilidad corneal. Este índice no recupera sus valores preoperatorios hasta el 6.º a 9.º mes tras la cirugía. Además el conjunto de cambios producidos (inestabilidad de la película, pérdida de células caliciformes, disminución del parpadeo) favorecen la hiperosmolaridad lagrimal, que a su vez incrementa la producción de citoquinas proinflamatorias, en detrimento de la restauración de la sensibilidad corneal.

Álvarez de Rementería. Boletín de la Soc. Oftalmo. de Madrid – N.º 48 (2008)


Durante nuestra cirugía de cataratas podemos disminuir o eliminar el astigmatismo del paciente mediante varias técnicas, a través de la incisión principal, a través de queratotomías límbicas relajantes, a través de incisiones corneales perforantes opuestas, o  a través de lentes intraoculares tóricas.