Se agudiza crisis por falta de agua en Irlanda del Norte

Belfast, dic 29 (Reuters) Temores a una crisis de salud pública crecían el miércoles en Irlanda del Norte puesto que el proveedor estatal de agua advirtió que el suministro no podría volver a la normalidad hasta dentro de varios días, lo que deja a decenas de miles de personas sin el líqudo.

Una gran helada seguida de un rápido deshielo hizo estallar los conductos de toda la provincia, lo que afecta a 40 000 hogares y comercios en Belfast, además de otros 77 pueblos y aldeas, informó el proveedor estatal Northern Ireland Water (NI Water).

Algunas personas están sin agua desde hace más de una semana y otras han visto como sus casas se inundaban con aguas servidas.

Los centros recreativos municipales ofrecen instalaciones de aseo en forma gratuita en toda la provincia, fueron instaladas tuberías en las calles para brindar suministro y Escocia ofreció enviar reservas de agua bebible embotellada. Los granjeros están preocupados por la obtención de agua para su ganado.

“Hay ahora realmente una emergencia de salud pública. Las familias han sido dejadas sin agua para beber y sin poder descargar sus baños. Esto es inaceptable”, dijo a BBC Peter Maguire, médico de la zona cercana de Newry.

“Hay demasiadas personas vulnerables que ahora están sin suministro de agua desde hace más de una semana. La situación no tiene precedentes y está fuera de control”, añadió Maguire que no ha tenido agua por ocho días.

Los funcionarios culpan a NI Water por no poder resolver el problema.

“Todos sabíamos que cuando sea que se produjera el deshielo iba a haber problemas con el agua, por lo que pienso que hubo falta de preparación por parte de NI Water”, dijo el ministro de Medio Ambiente, Edwin Poots.

NI Water señaló que está enviando suministros de reserva a diferentes áreas para tratar de proveer a todas las regiones con una cantidad limitada de agua.

Pero Liam Mulholland, jefe de servicios al cliente de NI Water, dijo que pasarán varios días antes de que se reparen las cañerías colapsadas.

Varios condados irlandeses enfrentan severa escasez y los municipios han racionado el agua en muchas zonas, lo que provoca el enojo de los restaurantes, bares y hoteles que se verán afectados en la víspera de Año Nuevo.