Varias ONG urgen a Congreso de México a aprobar la Ley del Cambio Climático

México, 16 nov (EFE) Reconocidas organizaciones ambientalistas urgieron hoy al Congreso mexicano a que apruebe una Ley de Cambio Climático que establezca un marco legal para dar atención al problema “de manera integral”.

El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y Heinrich Boll Stiftung recomendaron a México crear un marco legal antes de la próxima Cumbre de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP16), que se celebrará en el balneario de Cancún entre el 29 de noviembre y el 10 de diciembre.

La futura Ley de Cambio Climático permitirá el desarrollo de una arquitectura nacional para la generación de capacidades sectoriales que permitan avanzar hacia una economía baja en carbón y una transición energética, entre otros aspectos.

En rueda de prensa, la directora del cambio climático de WWF, Vanessa Pérez-Cirera, consideró que dicha Ley de Cambio Climático, “permitiría a México ubicarse como una nación estratégica al mostrar al mundo que cumple con sus compromisos internacionales”.

La activista insistió en que el país tendría una ventaja competitiva frente a otros en cuanto al acceso a fuentes de financiamiento internacional.

La representante en México de la organización Heinrich Boll Stiftung, Ingrid Spiller, consideró que el problema del Cambio Climático en México “es tan grande y complejo” que requiere una ley que garantice a mediano y largo plazo metas para enfrentar el calentamiento global y sus consecuencias.

Según la activista, esta ley debe cubrir tres aspectos “la arquitectura adecuada de la política pública nacional, el financiamiento suficiente para atender las necesidades más urgentes de adaptación y mitigación y mecanismos de vigilancia y rendición de cuentas de las acciones de manera sectorial”.

En esa misma rueda de prensa, la responsable del programa de aíre y energía del Cemda, Sandra Guzmán, aclaró que el único objetivo de promover una Ley de Cambio Climático es la de poder atender “con urgencia el problema de calentamiento global y fijar políticas públicas que permitan un especial cuidado en materia agrícola, forestal, energética, hídrica y ambiental”.

Finalmente, las activistas coincidieron en que el Legislativo mexicano podría frenar, a través de leyes, la desforestación, el uso desmedido de los subsidios a los combustibles fósiles y la eliminación de transporte público y privado en un servicio menos contaminante.