Bruma en Singapur pone presión ecológica en ASEAN

Charly Morales Valido

Hanoi, 27 oct (PL) La bruma que encapota el cielo y dificulta la respiración en Singapur cede hoy, aunque será más difícil disipar las dudas sobre la capacidad regional para mantener limpio el aire.

La Península Malaya sufrió una serie de incendios forestales que puso en evidencia el optimismo medioambiental mostrado hace apenas dos semanas por los ministros de Defensa del Sudeste Asiático.

De hecho, el término “bruma” es un eufemismo de la prensa para definir la contaminación provocada en esta Ciudad Estado, que se preciaba de ser quizás la ciudad más limpia del mundo.

La XVII Cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) comenzará mañana aquí con el imperativo de prometer menos y hacer más, para cumplir con sus ambiciosas metas comunitarias.

La asociación ecologista Greenpeace también aboga porque ASEAN se mueva del diálogo a la acción, pues considera que esta década se avanzó poco en el combate y prevención de los incendios forestales.

La arraigada costumbre campesina de quemar tierras para cultivo dificulta cualquier estrategia, y de hecho, todo comenzó esta vez con un fuego agrícola en la isla indonesia de Sumatra

El asunto de estas “brumas” ha estado en la agenda de ASEAN desde 1997, cuando una quema en Sumatra y Kalimantan afectó nueve millones de hectáreas en Brunei, Malasia, Filipinas, Singapur y Tailandia.