Las recientes lluvias no compensan el déficit en las reservas de agua
La Habana, jul 30 (Granma).- No podemos llamarnos a engaño. El aceptable comportamiento de las precipitaciones ocurridas en este mes de julio —tercer mes del periodo húmedo del año—, no compensa el déficit acumulado en las reservas acuíferas del país y la sequía continúa afectando a numerosos sectores económicos y sociales.
Según precisiones hechas a Granma por el doctor Jorge García Fernández, director de Cuencas Hidrográficas del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), es prematuro confirmar el inicio de la recuperación definitiva de los embalses y fuentes subterráneas de abastecimiento de agua, pues la situación actual no es producto de las escasas lluvias que se manifestaron en los meses de mayo y junio del presente año, como algunos piensan, sino que comenzó en etapas anteriores.
Aun cuando el periodo húmedo del 2008 —comprendido entre los meses de mayo y octubre— fue favorable, sobre todo por la incidencia de los fenómenos climatológicos que azotaron a nuestro país, los registros de los meses siguientes condujeron a que el 2009 cerrara con un comportamiento desfavorable de las lluvias, siendo el cuarto peor en los últimos 60 años de la serie histórica.
Al cierre de junio, los embalses solo acumulaban el 43% de su capacidad total.
Por otra parte, los pasados meses de mayo y junio solo acumularon 245 milímetros de agua como promedio, lo que representa apenas el 57% de la media histórica de precipitaciones para este periodo, explica el directivo del INRH y agrega:
“La capacidad total de los embalses es de 9 000 millones de metros cúbicos, pero al cierre de junio, apenas había 3 783 millones, lo que representa el 43,1%. De igual manera, era insuficiente la recuperación de los acuíferos subterráneos: del total de las 100 cuencas y/o subtramos principales controlados, 36 presentan un estado desfavorable y de los 64 restantes, 11 estaban próximos a esa categoría.”
Estudios realizados por especialistas del Instituto afirman que hasta el pasado 28 de julio, la repercusión de las precipitaciones en los 239 embalses administrados por el INRH, mostraron un discreto aumento al acumular 3 913,6 millones de metros cúbicos de agua, cifra que representa el 44.6% de la capacidad total y 131 millones de metros cúbicos más que al cierre de junio.
“Solo las provincias de Santiago de Cuba (83%), Holguín (70.9%), Guantánamo (65.7) y Cienfuegos (63.2%) exhiben una situación favorable. Las más críticas son Sancti Spíritus (19.3%) y Ciudad de La Habana (22.4%). Las restantes se encuentran entre el 25% y el 50% de su capacidad de embalse”, confirma el ingeniero Rigoberto Morales Palacios, director de Obras Hidráulicas del INRH.
Como se puede apreciar, las cifras demuestran que tanto en términos nacionales como territoriales, el comportamiento de las lluvias en julio no compensa el déficit acumulado de las precipitaciones, por lo cual, sería apresurado aseverar que se inicia una recuperación de los embalses y fuentes subterráneas de abastecimiento.
De modo que la actual situación exige el refuerzo de las medidas de control para contribuir al uso racional y eficiente del agua, lo mismo por parte de empresas agropecuarias como por entidades industriales y la población de forma general, para afrontar cualquier contingencia adversa de continuar la situación actual.
Situaciones más críticas de agua embalsada al cierre del 28 de julio
· Aunque Pinar del Río ha mostrado una ligera recuperación en los últimos días, se mantuvo durante el primer semestre del año con limitaciones para entregar el agua destinada al riego, fundamentalmente.
· Los embalses La Coca y La Zarza en Ciudad de La Habana, almacenan un 13.2% y 5.9%, respectivamente, lo que trae dificultades para el abasto al Este de la capital.
· En provincia de La Habana, la situación más compleja se presenta en las presas del sistema Este del territorio. Las lluvias no han propiciado la recuperación del embalse Mampostón, que tuvo que asumir volúmenes de agua por encima de lo planificado (9 millones de metros cúbicos) en el Balance de Agua, para la producción de alimentos. De mantenerse esta situación, tendría que activarse el trasvase de agua Matanzas-Habana con un gasto excesivo de electricidad.
· En Villa Clara los embalses de abasto Agabama y Gramal se han ido recuperando lentamente. Hoy almacenan el 19.1% y 13.4%, respectivamente, y ya se incorporaron al sistema de abasto de la ciudad de Santa Clara, que estuvo afectada varios meses por ello.
· La presa Zaza en Sancti Spíritus solo almacena 148.8 millones de metros cúbicos para un 14.6%. Este embalse, con una capacidad de 1 020 millones de metros cúbicos, además de ser el más grande del país, tiene serios compromisos con la producción de alimentos, específicamente el arroz, por lo que resulta necesaria su recuperación.
· En Holguín, aunque la provincia presenta una situación favorable, la presa Güirabo almacena 4.07 millones de metros cúbicos (26.8%), por lo que se hizo necesario activar el sistema de bombeo desde el río Cauto construido en años anteriores, para no afectar el abasto de agua a la capital provincial.
Fuente: http://www.granma.cubaweb.cu/2010/07/30/nacional/artic18.html
jul 30th, 2010. En: Noticias.