junio 2010 Archivos

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Ginebra, 3 jun (EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy su decisión de mantener la alerta de pandemia de la gripe A, un año después de su entrada en vigor y de la adopción de medidas sanitarias excepcionales en todo el mundo para controlar su propagación.

La directora general de la OMS, Margaret Chan, anunció que el Comité de Emergencia del organismo volverá a reunirse a mediados de julio para evaluar la situación.

La decisión adoptada hoy por Chan sigue a una reunión que mantuvo dicho Comité de Emergencia el pasado día 1 por teleconferencia.

Según las recomendaciones del Comité, “desde una perspectiva global, aunque continúa la pandemia, el periodo de actividad más intensa parece haber pasado en muchas partes del mundo”.

Pero agregaron que “sigue siendo crítico que los países mantengan la vigilancia respecto a la pandemia”.

Por ello, y tras estudiar las recomendaciones de los científicos, Chan decidió hoy no levantar la alerta y convocar una nueva reunión del Comité de Emergencia para mediados de julio, “cuando ya esté disponible la información sobre la estación invernal de gripe del hemisferio Sur”.

El virus AH1N1 se descubrió en abril de 2009 en Norteamérica y fue declarado el 11 de junio de ese año como la primera pandemia del siglo XXI debido a su rápida propagación geográfica y a los temores que generó por tratarse de un virus desconocido y con posibilidades de mutar.

Asimismo, se estableció que los grupos de riesgo no eran los habituales (ancianos), sino grupos de edad más jóvenes (incluso en buena salud), mujeres embarazadas y personas con problemas de salud crónicos.

Sin embargo, conforme transcurrían los meses se confirmaba que, globalmente, el virus tenía consecuencias moderadas y que su tasa de mortalidad era incluso menor a la de la gripe estacional.

El virus AH1N1 ha provocado en poco más de trece meses unos 18.000 decesos confirmados por pruebas de laboratorio, frente a las 500.000 muertes anuales que se atribuyen a la gripe estacional.

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Guatemala, 4 jun (PL) Las enfermedades respiratorias son hoy el principal problema detectado por brigadas de salud en los albergues donde permanecen los guatemaltecos damnificados por la perturbación climática Agatha.

A continuación se ubican las dermatológicas y las gastrointestinales, señaló la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED), encargada de brindar la información consolidada sobre las consecuencias de ese fenómeno.

Grupos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social visitaron locales de ese tipo ubicados en los departamentos de Alta Verapaz, Chiquimula, El Progreso, Jalapa, Quetzaltenango, Sacatepéquez, Totonicapán y Guatemala.

En todos los casos brindaron atención y medicamentos a cada una de las personas albergadas, agrega el parte de la CONRED, la cual mantiene en el país la alerta roja institucional y la anaranjada poblacional.

Con anterioridad, la representación de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó sobre la posibilidad de afecciones por enfermedades estacionarias, las cuales tienden a agravarse por la vulnerabilidad de los guatemaltecos albergados.

Esa agrupación advirtió acerca del eventual impacto por la contaminación o falta de agua, la humedad ambiental, el hacinamiento y la inadecuada higiene personal y colectiva.

Su pronóstico incluye un incremento de males agudos como diarreas y dengue, el cual antes de las intensas lluvias provocadas por el temporal había infectado a más personas que en el mismo periodo del año pasado.

Hizo un llamado a atender la salud mental de quienes perdieron a familiares y propiedades, tanto durante la tormenta como por la erupción del volcán Pacaya, aún alojados en los 446 locales habilitados por la CONRED.

Los cooperantes en ese campo tienen la tarea de determinar lo necesario a los ciudadanos afectados, con el fin de colaborar en la compra de medicinas e insumos quirúrgicos, según el representante de la OPS en Guatemala, Pier Paolo Balladelli.    De acuerdo con los últimos datos revelados por la CONRED, por las acciones de ambos desastres naturales fueron evacuadas 142 mil 959 personas y 88 mil 991 albergadas, en tanto murieron 156 y permanecen desaparecidas 102 como saldo de Agatha.

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San Salvador, 4 jun (PL) La tormenta tropical Agatha dejó pérdidas superiores a los seis millones de dólares en el sector agrícola de El Salvador, informó el ministro de Agricultura y Ganadería, Guillermo López.

Estudios preliminares indican que las lluvias y los vientos del fin de semana asociados a Agatha provocaron daños a la infraestructura agrícola por unos tres millones de dólares, y pérdidas en los cultivos por un valor similar, explicó el titular en conferencia de prensa.

De acuerdo con López, casi el 30 por ciento de los cultivos resultaron afectados por las precipitaciones.

Las siembras más perjudicadas fueron las de maíz, arroz, hortalizas y caña de azúcar, detalló.

Agatha también dejó aquí 11 muertos, dos desaparecidos y daños a la infraestructura vial por 20 millones de dólares.

El director de Protección Civil Jorge Meléndez dijo que más de 120 mil personas resultaron afectadas por las lluvias, debido a los daños en sus viviendas, pérdidas de cultivos o por tener que dejar sus actividades económicas como la pesca, el comercio y el turismo, entre otros.

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Caracas, Jun 4 (TeleSur).- Una onda tropical que se desplaza en el Caribe será la causante en Honduras de lluvias de moderadas a intensas, informó este jueves la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).

Según el organismo, las lluvias tendrán mayor incidencia a partir de este jueves en el centro, sur y oriente del país, regiones que, con la occidental, fueron las más afectadas por el paso de la tormenta tropical “Agatha”, que la semana pasada dejó unos 18 muertes y pérdidas materiales a la infraestructura y cultivos agrícolas.

Se esperan tormentas con actividad eléctrica, rachas y abundante nubosidad, especialmente en las zonas elevadas o de montaña, subrayó la Copeco en un comunicado.

El organismo de protección civil indicó que la cantidad de lluvia oscilará entre 20 y 35 milímetros por metro cuadrado diarios, con máximos de hasta 70 litros por metro cuadrado en las partes montañosas del sur del país.

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Dacca, Jun 4 (TeleSur).- A 113 aumentó la cifra de muertos que dejó el voraz incendio que destruyo parte del casco central de la capital de Bangladesh por una falla eléctrica. De acuerdo con la información oficial, los heridos son más de 100 y las labores de salvamento continúan.

El equipo de bomberos que trabajaba en esa zona de Dacca, suspendió los trabajos de búsqueda de sobrevivientes ante la rápida extensión del fuego que se inició a las 21H20 locales (17H20 GMT) en el barrio capitalino de Nimtali tras producirse una falla eléctrica, y que alcanzó edificios y comercios de la ciudad.

“Al menos siete edificios fueron invadidos por el fuego. Había almacenes que vendían productos químicos en la planta baja. Fueron presa de las llamas que se propagaron muy rápidamente”, explicó el jefe del servicio de bomberos, Abu Nayeem.

“Luchamos para entrar (en los edificios en llamas) por las escaleras muy estrechas de estos viejos edificios”, añadió.

Por su parte, el ministro de Salud, A.H.M Ruhal Haque exclamó que “es una enorme tragedia. Hemos solicitado a todos los médicos de Dacca que vengan a atender a los heridos”.

Las víctimas que se encuentran hospitalizadas se encuentran en estado crítico con graves quemaduras o intoxicadas por las emanaciones de humo.

Algunos testigos presenciales aseguraron a los medios locales que el siniestro lo inició la explosión de dos transformadores, sin embargo, otras personas señalaron que el fuego comenzó en una panadería, presuntamente a consecuencia de un cortocircuito.

El estallido que fue observado desde varios puntos de Dacca, generó grandes llamas que alcanzaron hasta unos 60 metros antes de propagarse hasta diferentes tiendas y viviendas cercanas a los transformadores.

Lugareños reclamaron el tiempo que demoró en llegar el equipo de bomberos a la zona de desastre, en tanto el vicedirector del cuerpo, Abdur Rashid se defendió argumentando que el atraso se debió a la estrechez de las carreteras y la magnitud del incendio.

El director de la unidad de quemados del hospital DMCH de Dacca, Shamanta Lal Sen, recibió a unas 150 personas heridas que llegaron para recibir atención médica. En el hospital de Salimullah se habilitó temporalmente una unidad de quemados.

“En cuarenta años de carrera, nunca había visto nada así (…) Tanta gente viniendo a la vez con quemaduras”, expresó el director de la unidad en el DMCH, mientras los familiares de las víctimas buscaban a sus allegados.

El Gobierno de Bangladesh ordenó la investigación del siniestro a cargo de un equipo de tres miembros quienes informarán sobre lo ocurrido en un lapso de una semana.

La primera ministra del país, Sheikh Hasina, envió sus condolencias a las familias de las víctimas, y ordenó a las autoridades de hospital que tomen medidas para tratar a los heridos, indicó su secretario de prensa, Mahabubul Shakil.

El incendio de este viernes es el segundo gran desastre registrado en Dacca en las últimas 72 horas, luego que el martes en la noche al menos 25 personas perdieran la vida al desplomarse un edificio de cinco pisos sobre una zona de refugiados.

El Gobierno de Bangladesh declaró el sábado como día de luto nacional.