sexualidad

Sexo, amor y erotismo. Palabras que provocanDestinado a los jóvenes, y también a padres, madres y profesores, el título Sexo, amor y erotismo: palabras que provocan, de la especialista cubana Aloyma Ravelo, suma aportes en el controvertido tema con mensajes confiables y orientadores.

Con varios títulos difundidos, de gran popularidad, la autora de este libro, máster en salud sexual y reproductiva, especializada en temas de la sexualidad humana por más de una veintena de años, es periodista de las revistas Muchacha y Mujeres, de la Editorial de la Mujer, la cual publica ahora el cuaderno.

Dividido en 10 capítulos, este libro de 366 páginas trata acerca del paso de la niñez a la adolescencia, esta etapa como tal, el arte de enamorar, sobre la intimidad, los conflictos amorosos, el amor, las encrucijadas de este y el sexo, las fantasías y las realidades, el cuerpo, las infecciones de transmisión sexual, el VIH y el sida. Ampliar.

Fuente: Periódico Granma

América Latina tiene una deuda con la lucha contra el machismo, un concepto que se define como una forma de mirar y construir la realidad, signada por formas concretas de pensar de la sociedad, aseguró aquí un experto.

Edgar Vega, especialista de la Universidad Andina, Simón Bolivar, de Quito, Ecuador, señaló a Prensa Latina que la sexualidad machista, marcada por las políticas ideológicas de las culturas, es la preponderante en la región, y afecta de manera negativa tanto a las mujeres como a los propios hombres. Es que la sexualidad es el campo más conflictivo de los seres humanos, donde se enraízan todas las discriminaciones, destacó el experto, quien participa en el VI congreso cubano de educación, orientación y terapia sexual, en esta capital.

La masculinidad hoy se desmonta y apela a todos los aportes que ha hecho la feminidad a la humanidad, dígase, el diálogo, la no violencia, soberanía del cuerpo, belleza. Todo ello puede estar acorde con la masculinidad, una apuesta por la vida y nuevas formas de convivencia, señaló Vega.

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Fuente: Periódico Girón

6tocongresosexualidad1El próximo lunes 26, comienzan las sesiones del 6to Congreso en el Palacio de las Convenciones de La Habana. Especialistas de Cuba y del mundo compartirán saberes bajo el lema La educación sexual en los procesos de transformación social.

Por primera vez, el Congreso de Educación, Orientación y Terapia Sexual crea espacios en las redes sociales de Internet para ampliar los debates académicos. Con este objetivo fueron creadas cuentas en Twitter, Facebook y Red social, conocida popularmente como el Facebook cubano.  Desde 2009, CENESEX abrió espacios en Facebook, Youtube y Twitter, fundamentalmente dedicadas a los temas de diversidad sexual.

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Fuente: CNP ITS/VIH/Sida

La bisexualidad ha tenido lugar en todas las épocas históricas y no siempre fue percibida como dicotómica. Ha sido la sexualidad más invisible, estigmatizada y discriminada de las mal llamadas sexualidades periféricas en las sociedades.

Para que a un hombre se le reconozca su masculinidad debe cumplir los patrones asignados a su género y uno de ellos es tener una sexualidad exclusiva de la masculinidad hegemónica. Al igual sucede con las mujeres y su patrón tradicional de feminidad.

Por lo general, la sexualidad femenina es pasiva, dominada, débil, responsable, se socializa en la intimidad y su espacio es el doméstico/privado. Mientras, la sexualidad masculina tiene libertad de expresión, su espacio de socialización es el público, es irresponsable y orientada genitalmente (falocéntrica). A su vez, es superior, fuerte y sirve como medio para pronunciar la violencia permitida a la masculinidad.

Hace algunos años televisaron una novela cubana titulada La cara oculta de la Luna, que abordaba, en una de sus historias, la bisexualidad. Fue una propuesta osada de una realidad encubierta. Si bien el caso del personaje en particular no diferenciaba con exactitud si era una homosexualidad reprimida o una bisexualidad, mostraba las vicisitudes que un hombre sufre en el proceso de identificación y aceptación, que puede ser delicado e intenso. Asimismo, las incomprensiones y rechazos sociales que generan la soledad en el individuo, debido al hecho de reconocerse con una sexualidad diferente a la norma heterosexual.

Vulnerabilidad, riesgos y VIH/sida

Existen varias teorías que dejan el debate sobre la bisexualidad en un estado primario, ya que se establece en relación directa con la homosexualidad y en etapas tempranas de la vida humana, con una base mayormente biologicista.

La psicología y la sociología se han apropiado de una nueva categoría de la epidemiología, conocida como Hombres que tienen Sexo con otros Hombres (HSH), para agrupar en ella a homosexuales, bisexuales, travestis/transexuales. Referencia un comportamiento sexual. Más que identidades, son prácticas sexuales que se encuentran entre lo esporádico y lo habitual; no importa si las prácticas son voluntarias, por una satisfacción sexual o económica, o por una violación.

Esta sexualidad en general, al ser marginada y discriminada, se convierte en vulnerable ante el VIH/sida. El espacio en que mayormente socializan los hombres bisexuales es en la clandestinidad y de madrugada en zonas oscuras. Las relaciones en estos lugares se establecen con una marcada violencia y es un espacio idóneo para el sexo.

Además de la vulnerabilidad social, este grupo presenta una vulnerabilidad biológica referida a la penetración anal. Otra es la epidemiológica, ya que el grupo más afectado por la epidemia es este, por tener relaciones sexuales con los dos sexos. También lo hace vulnerable la sexualidad masculina, que aumenta el riesgo a contraer el VIH/sida, debido a sus características socioculturales. Ampliar.

La Habana, noviembre 3/2011 (Revista Mujeres)

Expertos cubanos debatieron esta semana sobre sexualidad y enfermedades crónicas en un Taller que ratificó los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), dirigidos a resolver algunos de los problemas sociales más urgentes de nuestro tiempo.

El evento sesionó en el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), y el mismo sirvió de base para la selección de trabajos a presentar en el VI Congreso Cubano de Educación, Orientación y Terapia Sexual previsto para los días 23 al 26 de enero de 2012.

Disfunciones, derechos sexuales, sexualidad y cáncer, estrategias de prevención para afecciones de transmisión sexual y VIH/sida, trastornos mentales, reproducción, transexualidad y cirugías de adecuación genital, entre otros temas, se incluyeron en la agenda científica del foro.

Conferencias, paneles, simposios y mesas de discusión ocuparon a los participantes a la reunión, convocada por la Comisión Provincial de Educación Sexual, el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) y la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES).

En cuanto al próximo congreso, trascendió aquí que tendrá lugar en el Palacio de Convenciones de la Habana bajo el lema La educación sexual en los procesos de transformación social.

Paralelamente, se desarrollarán el II Coloquio Trans-identidades, género y cultura, el IV Taller metodológico de las Cátedras de Sexología y Educación de la Sexualidad, el II Simposio de Sexología clínica y el I Consenso de Enfermedades crónicas y Disfunciones sexuales.

La Habana, Cuba, octubre 1/2011 (Prensa Latina)

Los cambios ocurridos en la manera de asumir la sexualidad, el noviazgo y las relaciones de pareja durante las últimas décadas en Cuba han influido en el comportamiento de indicadores demográficos como la fecundidad.

Heydi Cárdenas, una enfermera capitalina de 37 años, comparte esta afirmación basada en su experiencia personal. Mi madre me contaba a menudo que casarse con 18 años y tener cuatro hijos, prácticamente uno detrás de otro, había sido el mayor error de su vida. Pero lo hizo para poder escapar de las múltiples prohibiciones que le imponían mis abuelos. Yo me prometí que no iba a repetir su historia, contó a SEMlac.

Con esa experiencia familiar, Cárdenas tuvo varios novios, paseó mucho con sus compañeros de estudios y comenzó a convivir con una pareja estable cuando ya había cumplido 28 años.

Entrevistada por SEMlac, al final de un reciente panel organizado en La Habana por la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES), Cárdenas cree, a estas alturas de su vida, que podría haberse organizado mejor, pues le hubiera gustado tener aunque sea dos hijos.

Las reflexiones de esta trabajadora de la salud estuvieron desencadenadas por la descripción de la situación demográfica actual de la isla, compartida por especialistas invitados al debate sobre Sociedad, demografía y sexualidad. ¿Dónde estamos y hacia donde vamos? Cuba presenta bajas tasas de mortalidad y, sobre todo, de fecundidad. Desde 1978 las mujeres de la isla no alcanzan el nivel de reemplazo poblacional, al no dejar al menos una hija al finalizar su período reproductivo.

En consecuencia, la nación caribeña vive un acelerado proceso de envejecimiento, en el cual la población de 60 años y más supera el 17 por ciento. En paralelo, disminuyen los matrimonios, aumentan las uniones consensuales y se advierte una liberalización de la sexualidad.

Para la también doctora Marisol Alfonso, actual oficial de programas de la Oficina del Fondo de Población de las Naciones Unidas en Cuba, en la isla se confirma una singular autonomía de la mujer que no deriva solo de la elevada escolaridad y participación en la actividad económica. Existe también una elevada seguridad en el sistema de salud y en los derechos sociales, explicó a SEMlac.

Durante su investigación de doctorado en el CEDEM, titulada La singularidad de una segunda transición demográfica en Cuba, Alfonso constató que las mujeres entrevistadas revelaron una mezcla de valores en relación a cómo toman sus decisiones sobre sexualidad, reproducción, relaciones y arreglos familiares en general.

Así, en ese proceso intervienen, entre otros asuntos, la diferenciación de los roles de género, de acuerdo con lo cual las mujeres suelen mostrar una actitud más pasiva frente a la relación sexual, por solo citar un ejemplo.

Pero también parece confirmarse una pérdida del valor del matrimonio, sobre todo entre las personas más jóvenes y escolarizados, precisó. Ampliar.

La Habana, septiembre 23/2011 (Revista Mujeres)