Campañas y comunicación social
La comunicación desempeña una función esencial en la prevención de las ITS-VIH/sida. Los programas y estrategias diseñados para promover cambios en la conducta sexual, han demostrado que la comunicación masiva puede llegar a ser muy efectiva para reducir los riesgos personales de contraer la infección.
Comunicarse con eficiencia sobre temas de salud en general constituye una tarea difícil. La información sobre salud y en especial sobre las ITS es a menudo compleja, polémica, contradictoria e involucra aspectos muy íntimos de la vida de las personas. La comunicación está mediatizada por normas culturales, valores y tradiciones que en muchas oportunidades pueden obstaculizarla o facilitarla. Pero cuando aborda temas de salud, la comunicación puede informar, convencer, fortalecer y educar a las personas, por lo que se convierte en un recurso de primera mano en la prevención de enfermedades.
Uno de los aspectos importantes para lograr la eficacia de los mensajes y tener un impacto en la población, es tener referencia sobre los diferentes modelos y teorías que tratan de explicar el comportamiento humano. Muchas de las teorías y modelos de la comunicación de masas y comercialización social no se originaron en nuestra región por lo que las mismas requieren de una adaptación basada en la realidad sociocultural de nuestro medio. Por otra parte, los programas de comercialización social se basan en prácticas empresariales que consisten en identificar cómo actúan los anuncios publicitarios para producir cambios de comportamiento que conduzcan a la compra de ciertos productos.
Aunque la comunicación para la prevención de las ITS o los programas de promoción de salud no es lo mismo que vender un nuevo detergente, cabe formularse muchas de las mismas preguntas. En consecuencia un paso importante en la modificación de la conducta es la evaluación preliminar de las actitudes de la audiencia a quienes va dirigida y el seguimiento subsiguiente para identificar cualquier cambio actitudinal.
Luego, para transmitir el mensaje con éxito, deben operar cinco componentes de la comunicación: credibilidad, diseño, canal, audiencia y conducta deseada. Un paso importante en la modificación de conductas es la evaluación preliminar de las actitudes de la audiencia meta y el seguimiento subsiguiente para identificar cualquier cambio producido. Este determinará si ha sido o no un éxito la campaña de comunicación.
Fuente:
Guía para los Comunicadores Sociales VIH/sida. Centro Nacional de Prevención ITS-VIH/sida. 2016 (Disponible en la biblioteca del CNP ITS-VIH/sida)