Día Mundial contra la Hepatitis 2017
El Día Mundial contra la Hepatitis se celebra desde el año 2008, cada 28 de julio en honor al natalicio del profesor Baruch Samuel Blumberg, descubridor del virus de la hepatitis B y laureado con el premio Nobel. En esta ocasión, ofrece la oportunidad de impulsar todas las iniciativas para aplicar la primera Estrategia Mundial del sector de la salud contra las hepatitis víricas 2016-2021, y ayudar a los Estados Miembros a conseguir el objetivo final: eliminar la hepatitis.
Los nuevos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), procedentes de 28 países que sufren cerca del 70% de la carga mundial de hepatitis, indican que los esfuerzos por eliminar esta enfermedad están ganando terreno. Estos datos, que se publican coincidiendo con el Día Mundial contra la Hepatitis, revelan que casi todos esos países han creado comités nacionales de alto nivel para la eliminación de la hepatitis, junto con planes y objetivos asociados, y que más de la mitad han asignado fondos específicos a este fin.
Mensajes clave del Día Mundial contra la Hepatitis 2017
1. Las hepatitis víricas constituyen un importante problema mundial de salud y exigen una respuesta urgente.
A finales de 2015 había aproximadamente 325 millones de personas con hepatitis crónicas. Se estima que en 2015 había en el ámbito mundial 257 millones de personas infectadas por el virus de la hepatitis B (VHB) y 71 millones de personas infectadas por el virus de la hepatitis C (VHC).
2. Muy pocas de las personas infectadas tuvieron acceso a pruebas y tratamiento, especialmente en los países de ingresos bajos y medianos.
A finales de 2015, tan solo el 9% de las personas infectadas por el VHB y el 20% de las infectadas por el VHC se habían sometido a pruebas y contaban con un diagnóstico. En 2015, de las personas diagnosticadas con infección por el VHB, el 8% (1,7 millones de personas) recibían tratamiento, mientras que el 7% de los diagnosticados con infección por el VHC (1,1 millones de personas) habían iniciado tratamiento. Las metas de alcance mundial para 2030 son las siguientes: el 90% de las personas con infecciones por el VHB y el VHC se habrán sometido a pruebas de detección y el 80% de los pacientes con las condiciones adecuadas habrán recibido tratamiento.
3. Las hepatitis víricas provocaron 1,34 millones de muertes en 2015 – una cifra comparable a la de las muertes por tuberculosis y superior a la de las muertes por VIH. Las muertes por hepatitis van en aumento.
4. Siguen registrándose nuevas infecciones de hepatitis, sobre todo de hepatitis C.
El número de menores de cinco años con infección crónica por el VHB se redujo al 1,3% en 2015 (frente al 4,7% anterior a la introducción de las vacunas). La vacuna contra la hepatitis B previene aproximadamente 4,5 millones de infecciones al año en niños. Sin embargo, en 2015 hubo 1,75 millones de nuevas infecciones por el VHC, debido principalmente al consumo de drogas inyectables y a la administración de inyecciones poco seguras en los entornos sanitarios de determinados países.
5. Conseguir eliminar las hepatitis en 2030 no es un objetivo excesivamente ambicioso; los informes de 28 países con una elevada carga de la enfermedad alientan el optimismo.
En el Día Mundial contra la Hepatitis 2017, la OMS publicará los perfiles de 28 países en los que se muestra que, a pesar de las numerosas dificultades, el empeño mundial por eliminar las hepatitis va ganando terreno. No obstante, persisten importantes obstáculos.
Fuente: Organización Mundial de la Salud