Juan Carlos Cremata Malberti

Escena del drama cubano ¨Chamaco¨, de Juan Carlos CremataEn la tarde del 11 de mayo del 2012, visitó el Centro Nacional de Prevención de las ITS-VIH/sida el cineasta cubano Juan Carlos Cremata Malberti, director de la controversial película Chamaco. Allí estableció un conversatorio con especialistas y promotores vinculados al trabajo de prevención de las Infecciones de Trasmisión Sexual (ITS). A continuación reproducimos un fragmento de la entrevista realizada por Raphael Caldas (CNP ITS-VIH/sida) a este destacado artista, publicada en la revista Lazo Adentro:

SI NO HUBIERA SIDO ARTISTA, ME HUBIERA GUSTADO SER…  ARTISTA

Cineasta cubano Juan Carlos CremataEn esta oportunidad ampliaremos nuestra Pantalla Chica, porque conversaremos, a viva voz, con un grande de la pantalla grande: Juan Carlos Cremata Malberti, Licenciado en Teatrología y Dramaturgia en el Instituto Superior de Arte, realizador de series infantiles y telefilmes para la televisión cubana antes de graduarse en la primera generación de la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV) de San Antonio de los Baños.

Oscuros rinocerontes enjaulados (muy a la moda), su tesis de graduación de la EICTV, le reportó el beneficio de la Beca John Simon Guggenheim, en Nueva York, y una ficha con su nombre en el archivo de copias de materiales audiovisuales del Museo de Arte Moderno (MOMA) de esa ciudad.

Siempre nutriéndose de la savia joven, eterno aprendiz, le disgusta ser llamado maestro, pues continuamente está instruyéndose, incluso cuando imparte clases. Sin embargo, nuestro invitado en esta ocasión, se convirtió en el primer cineasta cubano que gana un premio del Festival de Cannes y el Grand Prix Ecran Junior, es otro de los múltiples lauros que ha recibido durante el trayecto de su carrera.

Entre las cosas que dice el cineasta, quien debutó en la pantalla grande con el largometraje Nada, nominado a los premios Goya y Ariel, presentado en numerosos festivales y ganador del premio Ópera Prima en La Habana, está el compromiso de colaborar con el Centro Nacional de prevención de las ITS-VIH/sida en todas las acciones que emprende para el cuidado de la salud, la aceptación y respeto a la diversidad en sentido general y a la sexual en particular, así como contribuir a establecer conductas responsables frente al VIH/sida y otras infecciones de transmisión sexual.

Simbología:
RLA: Revista Lazo Adentro
JCC: Juan Carlos Cremata Malberti

RLA: ¿Dentro de las artes, dónde te siente más cómodo y ves mejor realizada tu obra?
JCC: Primero que todo, agradezco infinitamente la invitación a estar con ustedes y como ya dije, este es el inicio de los muchos proyectos que realizaremos de conjunto… y respondiendo tu pregunta te digo que nada del arte me es ajeno. Yo soy un animal artístico, eminentemente artístico, no sirvo para hacer otra cosa y vivo trabajando en función del arte las 24 horas del día. Me siento muy vinculado con las artes plásticas, las artes escénicas, el ballet, (“soy un coreógrafo frustrado”) la música, pero indiscutiblemente el cine es una especialidad que reúne a todas estas disciplinas artística y ha sido el medio en el cual me he podido realizar.

RLA: ¿Puedes hablarnos de alguien, en especial, que haya influido en tu obra?
JCC: Mucha gente, pero los primeros, mi madre y mi padre que tuvieron una influencia vital, no solo por ser madre y padre, sino porque fueron madre y padre muy especiales. Mi madre (Iraida Malberti) coreógrafa, después directora de televisión… yo nací, igual que mis hermanos en un estudio de televisión. Te puedo hablar de toda mi familia, porque yo soy sobrino de dos actores que durante mucho tiempo fueron muy famosos y te hablo de Sarita Malberti y Luis Alberto Ramírez, por tanto, esta influencia marcó definitivamente mis inicios. También están otras dos personas en Cuba que han marcado mi carrera artística: Héctor Quintero, cuya obra me selló por su manera de sentir y hacer sentir la cubanidad, y Alberto Méndez, uno de los grandes coreógrafos universales, que me impregnó la sensación de que el arte podía ser culto y podía ser popular.

RLA: Chamaco, tu más reciente creación, aún sin acabar… te ha proporcionado angustia… satisfacciones?
JCC: Angustias, porque es una película que contó con muy pocos recursos, con muy poca ayuda institucional, pero sin embargo yo creo que cada película te dicta la manera en que debe ser hecha. Hay una frase de un amigo director mexicano, que a mí me gusta repetir: “A veces el director escoge las películas que quiere hacer, pero otra veces son las películas las que escogen al director”. Eso me pasó con Viva Cuba y eso me pasó con Chamaco. Estas fueron películas que me tomaron por sorpresa, me escogieron y no me dejaron descansar hasta que las terminé. Por eso Chamaco a pesar de ser una película que, aún me está trayendo angustias, me ha dado también la convicción de que tiene que ser terminada y tiene que ser vista.
Satisfacciones, me las está dando aún sin acabar, porque cuando se hizo la proyección de una primera copia, salió un artículo de Rolando Pérez Betancourt diciendo que: ¨Chamaco, era mi mejor película¨… y yo me dije, “pero cómo es posible si aún no me he muerto y espero poder hacer otras”… (Risas)… Estoy teniendo satisfacciones de personas que han visto una copia “pirata” y me dicen: “me encantó tu película, es muy valiente tu película, muy buena película”… y me pregunto, ¨cómo pueden hacer valoraciones positivas de una película que aún no está terminada¨. Entonces pienso que el universo de satisfacción que me puede proporcionar Chamaco aún no ha llegado íntegramente, porque es un filme al que todavía no he autorizado a tener vida independiente, (aunque se la ha cogido) o sea, en otras palabras, Chamaco todavía no tiene certificado de nacimiento.

Drama cubano ¨Chamaco¨, de Juan Carlos Cremata¨Chamaco¨
Sinopsis:

A partir del descubrimiento de un muchacho asesinado en el Parque Central de La Habana, se desata una serie de coincidencias que denuncian y comentan acerca de las noches habaneras y la corrupción en el ambiente de la prostitución masculina.

Intérpretes:
Fidel Betancourt, Aramís Delgado, Laura Ramos, Caleb Casas, Alina Rodríguez, Francisco “Pancho” García, Luis Alberto García y Alfredo Chang.

RLA: Eres una persona muy constante, dedicada, incansable, sin apenas tiempo para realizar tu obra, sin embargo, crees en la importancia de la vinculación de tu arte con los objetivos del Centro Nacional de Prevención?
JCC: Mira, para mí es muy importante la vinculación de mi arte, de mi vida, con una causa tan necesaria como la que lleva a cabo el Centro Nacional de Prevención. A diferencia de otras enfermedades, el VIH es una epidemia terrible que ha acabado con la vida de muchas personas queridas y entre ellas, de muchos importantes artistas para mí como son Freddie Mercury, Rudolf Nuréyev, Copi, (Raúl Damonte Botana) gente única. Por eso, la vinculación de mi obra y mi vida con la causa del VIH, con la defensa de la diversidad, el respeto a la manera diferente de ser, es algo en que yo estoy metido, incluso antes de saber que yo era diferente y de que existía el CNP.

Al igual que trato de hacer con el arte, me empeño en tratar de lograr un mundo mejor, con un ser humano mejor, y es que mi tiempo, mi obra, mi vida toda está a favor de eso; no te diría solamente a favor de las luchas del CNP, del CENESEX y de otras instituciones, también en contra del terrorismo, en contra de la homofobia, a favor de la paz, por los derechos de la infancia; de todo lo que sea a favor de la comprensión, de la comunicación entre los seres humanos, y el CNP es pionero en eso, ahí estoy yo, por eso quiero estar con ustedes, quiero ser parte de ustedes, quiero vincular mi obra a la obra de ustedes. Es que… es algo tan inherente para mí como lo es ser artista… y no me preguntes si soy artista… lo soy.

RLA: Desde el carácter dual del cine, como medio de comunicación y como expresión artística, ¿crees que tu obra contribuye a la educación de las nuevas generaciones y en especial a la educación de la sexualidad?
JCC: En primer lugar, mi oficio es abrir puertas y ventanas. Soy un ser diferente, defiendo mi diferencia y respeto a todos los que son diferentes a mí, por tanto, todo lo que contribuya a engrandecer el universo mental de las nuevas y de las viejas generaciones, todo lo que abra las mentes al conocimiento de la existencia de diversas respuestas y a mostrar que la riqueza está en ese catálogo de diferencias, va implícito en mi obra. Mi creación contribuye a la educación todo el tiempo, aún sin proponérmelo, pero también finamente calculado. Yo no me trazo de a priori objetivos a lograr, eso es una intuición que va con mi manera de ser, yo soy así, yo respondo así, yo digo las cosas así, claro… siempre respetando el derecho de la gente. El día que empecemos a respetar eso, vamos a ser mejores seres humanos, y siento pena por aquellos que no ven la vida de esa manera. Como dijo el gran Benito Juárez… “el respeto al derecho ajeno, es la paz”.

RLA: El tabú hacia la sexualidad, los prejuicios por orientación sexual, la construcción social del VIH, la educación masculinizada, las inequidades de género se reproducen en el ámbito de la vida cotidiana y también a través de los medios de comunicación. Entonces, en esta sociedad plural donde todas y todos ocupamos el mismo espacio… ¿cuál crees que sería el mayor reto de los artistas cubanos?
JCC: Lograr vínculos con la educación, y lo digo no solamente desde el punto de vista de los cubanos, el problema del mundo es la falta de educación. Desde que nacemos nos inculcan modelos y patrones medievales y arcaicos: los varones son así, las hembras son asao… y los artistas estamos llamados a cambiar esa educación, a que se fomente el respeto, la solidaridad, las buenas costumbres, la camaradería, a que a las personas se les quiera, respete y acepte por sus valores, porque tenemos este gran espacio para compartir que es la tierra y lo estamos desaprovechando. Esas son virtudes que los artistas estamos obligados a inculcar en la población mediante nuestra obra. La gente cree en lo que decimos los artistas. Un economista, un político, un deportista expresa un mensaje a la gente y buena parte de ellos no prestan la debida atención; sin embargo, cualquier mensaje referido en la obra de un músico, una actriz, un cineasta tiene un impacto mayor y por supuesto, mejores resultados. Pasará el tiempo, más allá de barreras, más allá de conflictos, más allá de las guerras y sin embargo quedarán los artistas… quedará la obra de los artistas.

RLA: Supimos que ya es un hecho lo de filmar próximamente Contigo, Pan y Cebolla, la obra teatral de otro grande de la cultura cubana: Héctor Quintero. Además de éste, qué otros planes tienes para el futuro?
JCC: El sueño de mi vida es hacer Hombres sin mujer de Carlos Montenegro, creo que es una película justa y necesaria… es preciso que se haga esa película, es  urgente que se conozca que esa novela fue escrita acá en nuestro país, una obra intrínsecamente cubana y para mí sería un excelente filme. Esta es de esas películas que yo elegí, aunque la obra me escogió a mí. Por ejemplo,  justo cuando estaba terminando la filmación de El premio flaco me tropecé con la obra El Malentendido de Albert Camus y no pude parar de leerla, fue algo mágico; tuve que montarla para el teatro, y estuvo como seis meses en cartelera. Es que son de esas piezas que te atrapan y te dicen “tú eres mío”, y ojalá la vida me dé salud y energía suficientes para poder emprender ese proyecto. La novela me escogió a mí, pero yo elegí hacer la película, y cada paso que doy, (y los que en el futuro daré) es en función de poder hacer Hombres sin mujer. No quiere decir que después no seguiré haciendo más nada, creo que tengo un universo enorme de creación, sin faltar a la modestia, tengo millones de proyectos por hacer en cine y en teatro, pero hablo de Hombres sin mujer como la cúspide.

RLA: Luego de tantas revelaciones de tu vida y de tu obra, queremos saber una última cosa: si no hubieras sido artistas, qué habrías escogido ser?
JCC: Es que no tengo términos medios, en ninguna otra profesión hubiera dado lo que he dado y pretendo seguir dando en ésta. Definitivamente si no hubiera sido artista, me hubiera gustado ser Artista.

Filmografía de Juan Carlos Cremata:

1988: Diana, documental; 1990: Oscuros rinocerontes enjaulados (muy a la moda), cortometraje; 1999: La Época, El Encanto y el Fin de Siglo, cortometraje; 2001: Nada, largometraje; 2005: Viva Cuba (codirección con Iraida Malberti); 2008: El premio flaco (codirección con Iraida Malberti); 2010 Chamaco, largometraje.

Fuente: CNP ITS-VIH/sida. Mayo 11, 2012