Epidemia: resumen 2008

Estimados de la epidemia VIH/sida 2008

Personas que vivían con el VIH en 2008

Total 33,4 millones [31,1 _ 35,8 millones]
Adultos
31,3 millones [29,2 _ 33,7 millones]
Mujeres
15,7 millones [14,2 _ 17,2 millones]
Menores de 15 años
2,1 millones [1,2 _ 2,9 millones]

Nuevas infecciones por el VIH en 2008

Total 2,7 millones [2,4 _ 3,0 millones]
Adultos
2,3 millones [2,0 _ 2,5 millones]
Menores de 15 años
430 000 [240 000 _ 610 000]

Defunciones causadas por el sida en 2008

Total 2,0 millones [1,7 _ 2,4 millones]
Adultos
1,7 millones [1,4 _ 2,1 millones]
Menores de 15 años
280 000 [150 000 _ 410 000]

La epidemia del VIH ha cambiado al mundo

En los países más afectados, el VIH ha reducido la expectativa de vida en más de 20 años, ralentizó el crecimiento económico y profundizó la pobreza de los hogares.

En África subsahariana sola, la epidemia ha dejado huérfanos1 a casi 12 millones de niños menores de 18 años. El VIH ha sesgado drásticamente la distribución etaria natural en muchas poblaciones nacionales de esta región, lo que potencialmente plantea peligrosas consecuencias para la transferencia de conocimiento y valores de una generación a la siguiente.

En Asia, donde las tasas de infección son mucho más bajas que en África, el VIH genera una pérdida de la productividad mayor que cualquier otra enfermedad; y probablemente empuje a otros 6 millones de hogares a la pobreza para el año 2015, a menos que se intensifiquen las respuestas nacionales.

Al mismo tiempo, la epidemia ha elevado la conciencia mundial sobre las disparidades en materia de sanidad y catalizó una acción sin precedentes para hacer frente a algunos de los obstáculos más graves al desarrollo en el mundo.

Ninguna enfermedad en la historia ha impulsado una movilización comparable de recursos políticos, financieros y humanos, y ningún desafío al desarrollo ha originado un nivel tan sólido de liderazgo y pertenencia por parte de las comunidades y los países más gravemente afectados.

En gran parte debido al impacto del VIH, las personas de todo el mundo se han vuelto menos dispuestas a tolerar las desigualdades en la situación sanitaria y económica que por mucho tiempo no se han abordado.

El aumento 6 veces mayor en el financiamiento destinado a actividades relacionadas con el VIH en países de ingresos bajos y medianos durante esta década comienza a producir resultados. Por primera vez desde que lo que ahora conocemos como sida se reconoció hace 27 años, se pueden advertir señales de un considerable progreso en la respuesta al VIH. El número anual de defunciones por sida ha descendido en los últimos dos años de 2,2 millones [1,9 millones-2,6 millones] en 2005 a 2,0 millones [1,8 millones-2,3 millones] en 2007, en parte como consecuencia del importante aumento en el acceso al tratamiento del VIH producido en los últimos años.

Desde que el VIH fue reconocido por primera vez, los enfoques y las metodologías para vigilar la epidemia y la respuesta se han perfeccionado en forma continua. Como consecuencia, el mundo está mejor preparado que nunca para estimar la prevalencia del VIH o la tasa de nuevas infecciones por el VIH, para determinar el alcance de la cobertura de los programas, para caracterizar y evaluar las respuestas nacionales y para medir el nivel de financiamiento asignado a programas sobre VIH en países de ingresos bajos y medianos.

Hallazgos clave

  • El porcentaje mundial de personas que viven con el VIH se ha estabilizado desde el año 2000.
  • En 2007, se registraron 2,7 millones de nuevos casos de infección por el VIH y 2 millones de fallecimientos relacionados con el sida.
  • La tasa de nuevas infecciones por el VIH ha disminuido en varios países pero, a nivel mundial, el aumento de nuevas infecciones en otros países contrarresta, al menos en parte, estas tendencias favorables.
  • En 14 de los 17 países africanos que cuentan con datos encuestales aceptables, el porcentaje de embarazadas jóvenes (15-24 años) que viven con el VIH ha disminuido desde el período 2000-2001. En 7 países, la caída del número de infecciones ha igualado o excedido la reducción del 25% establecida como objetivo para 2010 en la Declaración de compromiso.
  • A medida que aumentó el acceso al tratamiento en los últimos diez años, disminuyó el número anual de fallecimientos por sida.
  • África subsahariana continúa siendo la región más afectada por el VIH y, en 2007, le correspondieron el 67% de todas las personas que viven con el VIH y el 72% de los fallecimientos a causa del sida. Sin embargo, algunos de los aumentos más preocupantes en el número de nuevas infecciones se registran en países muy poblados de otras regiones, como Indonesia, la Federación de Rusia y diversos países de ingresos altos.
  • A nivel mundial, el porcentaje de mujeres entre las personas que viven con el VIH se ha mantenido estable (en el 50%) durante varios años, aunque la proporción de infecciones en las mujeres está aumentando en varios países.
  • En casi todas las regiones fuera del África subsahariana, el VIH afecta en forma desproporcionada a usuarios de drogas inyectables, hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y profesionales el sexo.
  • Cantidades inéditas de grupos de la sociedad civil se han sumado a sus homólogos gubernamentales y participaron en este proceso de presentación de informes; utilizaron su participación como un medio para comunicar al mundo la situación que atraviesa cada uno de sus países.
  • La respuesta al VIH resulta crucial para el progreso de toda la amplitud de la agenda de desarrollo mundial.
  • Un aumento de diez veces en el financiamiento de programas de VIH en países de ingresos bajos y medianos comienza a dar frutos. En muchos países, se observa un importante progreso en la reducción de las defunciones a causa del sida y en la prevención de las nuevas infecciones.
  • Sin embargo, el progreso sigue siendo desparejo, y el futuro de la epidemia aún es incierto, lo que subraya la necesidad de una acción intensificada para avanzar hacia el acceso universal a la prevención, el tratamiento, la atención y el apoyo relacionados con el VIH.
  • El cumplimiento de los numerosos compromisos políticos asumidos en relación al VIH requerirá un liderazgo más sólido, basado en éxitos recientes y las enseñanzas adquiridas, mayores recursos financieros, mejor coordinación del esfuerzo y acción eficaz para abordar los factores determinantes sociales del riesgo y la vulnerabilidad al VIH.
  • Se están fortaleciendo los sistemas de vigilancia y evaluación, en gran parte con fondos externos, porque los países recién comienzan a beneficiarse con la disposición estándar que estipula que hasta el 10% de los fondos de programas pueden destinarse a fortalecer dichos sistemas.

Fuente:
Informe sobre la epidemia mundial de sida 2008.  ONUSIDA
Datos y cifras mundiales 2009
Principales diapositivas sobre epidemiología 2009