La Sífilis
La sífilis es una infección crónica sistémica con diversas manifestaciones clínicas. El Treponema pallidum es el agente causal. Su trasmisión es predominantemente sexual y maternofetal y puede ser trasmitido por el contacto directo con las lesiones infectantes y las membranas mucosas o piel no intacta del susceptible.
Sífilis Primaria
Se caracteriza por la presencia del chancro duro y sifilítico, lesión generalmente única, rosada o ulcerada, poco dolorosa, con base endurecida, fondo liso, brillante y secreción serosa escasa. La lesión aparece como promedio a los 21 días después del contacto infectante y puede acompañarse de adenopatía móvil, no dolorosa no supurativa y múltiple.
En hombres se localiza frecuentemente en el galde o en el surco balano prepucial. En la mujer es más común en los labios menores, paredes vaginales o en el cuello uterino, razón por la que es importante realizarse el examén ginecológico con espéculo.
Sífilis Secundaria
Se caracteriza por la presencia de lesiones cutáneo mucosas, no ulceradas, que aparecen de 6 a 8 semanas después de iniciado el chancro. Son lesiones generalmente acompañadas de dolor en las articulaciones, fiebre, cefalea y malestar general.Son comunes las manchas eritematosas de aparición brusca y lesiones en la región plantar y palma de las manos que pueden llegar a ser escamosas. Caída de la cola de las cejas y de la cabeza, entre otros.
Fuente: Manual de Infecciones de trasmisión sexual. Pautas para su tratamiento.