Prevención y control
La prevención es fundamental para evitar que la enfermedad se propague. En el cólera no tiene ninguna utilidad el tratamiento colectivo sistemático con antibióticos o la profilaxis masiva. La clave para mitigar los brotes epidémicos de cólera, controlar la enfermedad en zonas endémicas y reducir las defunciones consiste en adoptar un criterio multidisciplinario basado en la prevención, la preparación y la respuesta, aunado a un sistema de vigilancia eficaz.
La vigilancia del cólera debería formar parte de un sistema de vigilancia integrada de enfermedades que incluya la recogida de datos en el ámbito local y el intercambio de información en el ámbito mundial.
La detección de un supuesto caso de cólera se basa en la sospecha clínica en pacientes a partir de 2 años de edad con diarrea líquida aguda y deshidratación grave o que fallecen por diarrea líquida aguda.
Las pruebas de diagnóstico rápido pueden ser una herramienta útil para detectar los brotes de cólera; sin embargo, para confirmar el diagnóstico, se envían muestras de heces a un laboratorio para confirmar la presencia de V. cholerae O1 u O139 mediante cultivo o mediante reacción en cadena de la polimerasa (PCR).