Cuadro clínico
En los pacientes sintomáticos, el chikungunya suele manifestarse entre cuatro y ocho días después de la picadura de un mosquito infectado (aunque el intervalo puede oscilar entre dos y 12 días). La fiebre chikungunya se caracteriza por la aparición súbita de fiebre, generalmente acompañada de dolores articulares. Otros signos y síntomas frecuentes son: dolores musculares, dolores de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas. Los dolores articulares suelen ser muy debilitantes, pero generalmente desaparecen en pocos días.
La mayoría de los pacientes se recuperan completamente, pero en algunos casos los dolores articulares pueden durar varios meses, o incluso años. Se han descrito casos ocasionales con complicaciones oculares, neurológicas y cardiacas, y también con molestias gastrointestinales.
La mayoría de los pacientes se recuperan completamente, aunque en algunos casos se han descrito complicaciones oculares, cardiacas o neurológicas. Los pacientes de edad muy corta o muy avanzada corren más riesgo de presentar cuadros clínicos graves; entre ellos se incluyen los recién nacidos que se infectan durante el parto o que son picados por mosquitos infectantes en las semanas posteriores al parto, así como las personas mayores con dolencias preexistentes. Los enfermos graves pueden requerir hospitalización debido al riesgo de sufrir daños orgánicos e incluso la muerte.
A la luz de los datos disponibles, es probable que las personas que se recuperan de la enfermedad queden inmunizadas frente a futuras infecciones por el virus chikungunya.
Cuando los pacientes solo tienen síntomas leves, la infección puede pasar inadvertida o diagnosticarse erróneamente como dengue en zonas donde este es frecuente.