Campañas

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Irlanda lanza una sorprendente campaña que llega más allá de sus fronteras a través de las redes sociales. El mensaje, transmitido por medios digitales para la temporada navideña, hace énfasis en la elección personal: ¿Quién quieres que te lleve a casa esta noche? Cada uno deberá escoger entre un taxi, una ambulancia, un auto policial y otro funerario.
Detalles sobre la eficacia de la campaña aparecen en el siguiente artículo.
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Emotional drivingNo sólo saber conducir, sino también circular con seguridad es el mensaje que, desde finales de 2014, la empresa Gonvarri nos dice en su proyecto. Se trata de entender la seguridad vial con optimismo, lo que podría denominarse como conducción emocional. Una experiencia a nivel de empresa reflejada en la publicación de un libro: Emotional Driving y la emisión de una webserie, donde los protagonistas son sus propios trabajadores. Leer más…

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stop accidentsAquel día había empezado como otro cualquiera. Después de mis clases universitarias, jugué un rato al fútbol con mis amigos. Y, después, acudimos a una fiesta. Normalmente, cuando bebía, me quedaba en casa de un amigo a dormir. Pero aquella noche mi amigo no salió, así que decidí volver a casa en mi propio coche. Mi único miedo, entonces, era tropezarme con un control de alcoholemia. Leer más…

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automóvilLa publicidad en general es reflejo de la sociedad de cada momento, de nuestros deseos y de nuestras preocupaciones. Por eso, antes los anuncios de coches aludían a características como la velocidad punta o las filigranas al volante que permitía al conductor, e intentaban evocar sentimientos tan intangibles como la sensación de riesgo o el afán por la aventura. Leer más…

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estrellas amarillas en la viaEn las principales avenidas de Bogotá se ven estrellas amarillas por todas partes. Cada una de ellas permanece indeleble en el asfalto para que todo aquel conductor o transeúnte que la vea sepa que, exactamente en ese sitio, la imprudencia se llevó otra vida: la de alguien que no pudo esquivar el exceso de velocidad de su victimario, o quizá la de un mortal desprevenido que, luego de hacer unos cálculos errados, prefirió lanzarse a la aventura de los carriles para no tener que buscar la cima del puente peatonal subiendo los 20 o 30 peldaños de la escalera. Leer más…

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