Estados Unidos podría tener que desechar millones de dosis de vacuna H1N1
Estados Unidos podría tener que tirar millones de vacunas contra la gripe A (H1N1) debido a que no ha usado ni la mitad de los 229 millones de dosis que adquirió el gobierno para afrontar la amenaza de pandemia durante la pasada temporada de gripe, informa hoy el diario “The Washington Post”.
Según el rotativo, solo 91 millones de vacunas fueron administradas en el país, que lanzó en otoño (boreal) la campaña de inmunización más 1ambiciosa! de la historia estadounidense, con un costo de 1600 millones de dólares.
Se estima que unos 60 millones de dosis aun no usadas podrían ser o bien donadas a países pobres (alrededor de 25 millones) o guardadas para un uso futuro (los restantes 35 millones). Entre dos y tres millones más serán entregadas al Departamento de Defensa.
Con todo, sobrarían más de 70 millones de vacunas que podrían ser desechadas si no se usan antes de su fecha de caducidad, sobre todo porque ya fueron introducidas en las jeringas o los sprays nasales para su administración inmediata, advierte el “Post”.
Anne Schuchat, de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, defendió sin embargo la decisión de haber adquirido tantas vacunas al recordar la “gran incertidumbre” que había sobre la pandemia en sus primeros momentos.
“Estábamos afrontando una situación muy inusual. Teníamos una pandemia. Teníamos a gente joven muriendo”, recordó en entrevista con el diario. “Queríamos asegurarnos de que teníamos suficientes (dosis)”, agregó.
El problema fue que si bien el gobierno ordenó las vacunas a tiempo, los laboratorios tardaron más de lo previsto en entregar los pedidos, con lo que buena parte de las dosis solicitadas llegó a las farmacias y centros de salud en la segunda oleada de infecciones del pasado otoño boreal, cuando ya empezaba a disminuir la demanda de protección.
Los CDC estiman que en Estados Unidos más de 60 millones de personas resultaron infectadas por el virus, de las cuales al menos 265 000 tuvieron que ser ingresadas en hospitales y más de 12 000 murieron.
Si bien esta cifra es menor que la media de 36 000 personas que fallecen cada año a causa de la gripe estacional en el país, el problema con el nuevo virus es que afectó a grupos inusuales, como jóvenes sanos, niños y mujeres embarazadas, con lo que 2el impacto fue mucho más grave que lo que indican las cifras”, subraya el “Post”.
Washington, abril 1, 2010 (dpa)
Publicado: abr 1st, 2010.