Temen países latinoamericanos por acopio de vacunas por los países ricos

Buenos Aires, julio 22/2009 (ANSA)
El ministro de Salud de Argentina, Juan Manzur, admitió hoy que entre los países latinoamericanos existe “temor” a que las naciones ricas acaparen la producción  de las vacunas contra la gripe A.
“Queremos ser tenidos en cuenta y no sabemos si tendremos una cantidad de vacunas disponible”, afirmó el ministro de Salud en una ronda de prensa con agencias y diarios extranjeros. El ministro argentino reconoció que junto con sus colegas  regionales “tememos que los países ricos compren todo y dejen sin vacunas a los que tenemos menos dinero”.  
Manzur anticipó que durante la cumbre del Mercosur que sesionará el jueves y viernes en Asunción, los ministros de Salud de la organización evaluarán una estrategia para acceder a la vacuna, a través de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Voceros del Ministerio de Salud anticiparon que el Instituto Malbrán de Buenos Aires descifró la secuencia genética del virus A(N1H1), información que será compartida con los ministros del  Mercosur.Roberto Gasparini, experto en Higiene de la Universidad de Génova, estimó la semana pasada que la industria farmacéutica está en condiciones de producir vacunas para 600 millones de personas y que los países europeos ya reservaron alrededor de 370 millones de tratamientos.
Gasparini anticipó que la producción de vacunas generará un negocio de “decenas de miles de millones de dólares”, según se deduce de los pedidos por anticipado de los países y el costo de la dosis -estimado en 9 euros- y de un tratamiento completo, que demandará no menos de 18 euros. Manzur respondió hoy que “no tiene asidero” la sospecha de que la gripe A fue expandida por los laboratorios farmacéuticos para incrementar sus ganancias, como indican algunas versiones.
En cuanto a los pedidos anticipados, entre los países europeos reservaron alrededor de 370 millones de tratamientos: Francia encargó 94 millones y firmó un contrato de mil millones de euros con tres laboratorios para garantizar su provisión, y Gran Bretaña pretende inmunizar hasta 70% de su población, equivalente a 40 millones de personas. Alemania, Italia y España, también pretenden vacunar al 40% de su población y sumada la demanda de otros países europeos, se estima que 370 millones de tratamientos ya tienen destino.
Para evitar que el suministro de vacunas quede sometido “a las fuerzas del mercado”, el presidente del sindicato de médicos de Río de Janeiro, Jorge Darze, pidió que se declare a la vacuna “patrimonio de la humanidad”. “En un momento en que el mundo vive una pandemia de gripe A(N1H1), es fascista admitir que por razones de mercado los países más pobres, los menos preparados para enfrentar la enfermedad, no podrán acceder en igualdad de condiciones a una vacuna que puede salvar miles de vidas”, dijo Darze, entrevistado por ANSA en Río de Janeiro.
Margaret Chan, directora de la Organización Mundial de la Salud, advirtió la semana pasada que “es previsible que la mayor parte de las vacunas que se produzcan se dirijan a los países ricos”, durante un seminario sobre propiedad intelectual en Ginebra, Suiza. “Esto será un nuevo ejemplo de cómo la imposibilidad de pagar tiene como resultado negar a los más pobres el acceso a los servicios y productos de salud”, agregó la directora de la OMS.
“Dar como asentado que los países más pobres quedarán excluidos de la posibilidad de acceder a una vacuna que los puede salvar, es perverso. La vacuna contra la influenza A(H1N1) debe ser declarada patrimonio de la humanidad, y no ser considerada un producto que se rige por las reglas del mercado y por tanto, al alcance de unos pocos”, subrayó Darze.
Manzur reconoció hoy que la producción de la vacuna “es un anhelo” de todos los países de la región, pero admitió que en Argentina no se produce ni la vacuna común contra la gripe, que es importada por laboratorios multinacionales.
El ministro argentino destacó que desde la semana pasada, cuando la Organización Mundial de la Salud consideró inútil contar caso por caso a las víctimas de la epidemia, muchos han comenzado a hablar con claridad. “En Australia admitieron que esperan alrededor de seis mil muertes, en Inglaterra hablan de hasta 65 mil, la ministra de Salud de España, Trinidad Jiménez, a su vez habla de hasta ocho mil”, recordó el funcionario. También detalló que las autoridades brasileñas “están  hablando de 37 millones de infectados”.  
En Argentina, hubo 18 943 muertes por enfermedades respiratorias graves en el 2007 y en la actualidad, el 90% de los casos reportados corresponden a la gripe A(N1H1), comparó el ministro. Sin embargo, mencionó como positivo que las consultas en el país disminuyeron entre 30 y 35% en los últimos días “y ya tenemos camas libres para casos de urgencia”.
El funcionario insistió en que se trata de un virus nuevo del que todos estamos aprendiendo y los países del norte observan como estamos combatiendo la epidemia, para prepararse ellos también durante el próximo invierno boreal.
El ministro Manzur también anticipó que durante la cumbre del Mercosur, Argentina propondrá una campaña coordinada contra el dengue para evitar que se repita la epidemia del año pasado. “Nuestra propuesta es un plan integral de abordaje, que incluye la salud, las obras públicas y muchas otras áreas sociales y de infraestructura”, enfatizó el ministro.