Autoridades del país y de la capital chequean situación epidemiológica en territorios habaneros

El vicepresidente cubano, Dr. Roberto Morales Ojeda; acompañado por el ministro de Salud Pública, Dr. José Ángel Portal Miranda; el presidente del Consejo de Defensa Provincial, Luis Antonio Torres Iríbar y otras autoridades del país y de la capital, visitaron varios municipios habaneros con el objetivo de chequear la situación epidemiológica y el cumplimiento de las medidas higiénico-sanitarias incrementadas en algunas zonas de la ciudad.

Durante el recorrido se dio a conocer que Centro Habana, por ejemplo, posee 161 casos confirmados acumulados de COVID-19 y una tasa de incidencia municipal de 118,3 por 100 000 habitantes. En los últimos 15 días, según Aylin Matos Caso, directora municipal de Salud, existen 16 casos activos, la tasa de incidencia es de 12,9 y cuentan con dos eventos de trasmisión local.

Miles de PCR y test rápidos se han realizado como parte las acciones para el enfrentamiento a la pandemia, en especial en estas últimas jornadas, en manzanas de los consejos populares Los Sitios y Colón.

Otras de las medidas adoptadas fueron limitar el acceso a los cuadrantes en estudio, el cierre de todos los centros de trabajo enclavados allí, realizar pesquisas activas, usar termometría digital en ellas, distribuir PrevengHo-Vir a la población de la zona, además de constantes inspecciones sanitarias estatales, certificar los controles de foco en 24 horas, garantizar la divulgación de las medidas y la movilización para la realización de los PCR.

Reparaciones de luminarias, monitoreo diario del abasto de agua, distribución de productos de primera necesidad a domicilio y venta de la canasta básica, lejía, productos alimenticios y de aseo son, entre otras, algunas de las acciones que se acometen en ese territorio.

El Dr. Francisco Durán, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, comentó que se ha trabajo con la complejidad propia de esta área, como la cantidad de población flotante, y realizó un llamado a incrementar el control de las medidas sanitarias y la percepción del peligro. De igual manera, se vela porque la actividad realizada por los estudiantes tenga una mayor efectividad y por la atención diferenciada de los sectores vulnerables.

Ya en el municipio se había trabajado en 21 zonas (dígase de silencio, colindantes con casos positivos y donde existían personas con comorbilidad) al decir de Matos Caso, quien aclaró que la ejecución de las pruebas actuales estuvo sujeta a la cantidad de casas vacías o cerradas, y las personas que viven fuera de Centro Habana.

Torres Iríbar se refirió a que las medidas tomadas fueron profundas y los habitantes y los organismos respondieron favorablemente ante la situación; “queda agilizar los resultados de los PCR”, agregó.

A la par, Morales Ojeda, destacó que, si no se hubiesen tomado estas normas rigurosas, los resultados en La Habana serían diferentes, “aunque quisiéramos que no hubiera casos… No hemos logrado cortar la trasmisión del virus en Centro Habana”.

El vicepresidente insistió en lograr una vigilancia a nivel de consultorio médico de la familia, cuadra, área de salud, en todos los espacios; incrementar la pesquisa clínica, evitar que exista el confirmado, actuar con mucha agilidad en los laboratorios, así como acompañar a las autoridades del Ministerio del Interior en su aseguramiento del cumplimiento de las medidas y lograr que todos los pacientes tengan un nivel inmunológico elevado. “Aquí (Centro Habana) las medidas tienen que ser todas en incremento (…) Y realizar PCR cuando haya un riesgo de trasmisión, aun cuando no haya casos”, aseveró el funcionario, quien indicó a los municipios prepararse para cuando los alumnos de Medicina salgan de vacaciones el mes próximo.

Con respecto a la situación epidemiológica del Cerro, se acumulan 123 casos confirmados y en los últimos 15 días posee 22 positivos con fuentes de infección conocida. El último caso es del 10 de julio y se han realizado casi 4000 PCR.

Este territorio tuvo dos eventos ya cerrados (el del Consejo Popular Latino y el de la Calzada de Buenos Aires) y posee dos controles de focos activos: evento de San Joaquín y Omoa, con fecha probable de cierre el 30 de julio, y foco de la calle Benjumeda; en ambos se cumplen las acciones de control de foco establecidas y se mantiene priorizada la pesquisa activa con termometría.

Varias de las medidas adoptadas de manera general en el Cerro están relacionadas con el ingreso de los casos confirmados, aislamiento de todos los sospechosos, pruebas diagnósticas (test rápido y PCR) en zonas de riesgo, elevación del nivel inmunológico con PrevengHo-Vir a toda la población y Biomodulina en los  hogares de ancianos, estudio de prevalencia de la COVID-19 a trabajadores de salud, reforzamiento del nivel primario en la detección y traslado oportuno de los casos, actualización permanente y cumplimento de los protocolos y medidas de bioseguridad, y fortalecimiento del quehacer epidemiológico en los territorios e instituciones.

La organización de los servicios y la disciplina ciudadana fue algo destacable durante el encuentro. El representante de la Policía Nacional Revolucionaria del municipio indicó que no ha existido ningún problema en cuanto al control de la movilidad de la población y de los vehículos, y se insistió en trabajar de manera diferenciada la pesquisa activa en las personas vulnerables y la correlación hospital-área de salud.

Se esperan los resultados faltantes de las pruebas y, de manera general, los territorios deben seguir profundizando en las entrevistas epidemiológicas para identificar la mayor cantidad de contactos posibles. Proteger a la población con los productos de la ciencia, no descuidar los protocolos sanitarios en los centros laborales, el combate a los coleros y acaparadores de mercancías, y ante cualquier síntoma descartar primero -con análisis- COVID-19 y dengue, fueron encargos de las autoridades para que La Habana logre transitar a una segunda fase de recuperación.

La labor realizada por el personal de Salud en el enfrentamiento a la pandemia, enfatizó Morales, tiene un gran reconocimiento por parte de nuestro pueblo, muestra de ello lo constituye el merecido aplauso a las 9:00 p.m.; alabanza compartida por los pueblos de otros países gracias al desempeño de la brigada internacionalista Henry Reeve.

“Aun cuando cerremos los eventos, la estratificación de las zonas de riesgo es clave”, aseveró, al igual que el cumplimiento de las medidas sanitarias para que las actividades del verano no se conviertan en un problema.

Por otra parte, en el Cotorro predominan los casos asintomáticos, allí se realizan grandes cantidades de PCR (3144 en los últimos 15 días) y test rápidos en los cuadrantes donde se limitó el movimiento, priorizan la vigilancia epidemiológica (tanto al interior del municipio, como en las fronteras con otros territorios de la ciudad y la provincia de Mayabeque), refuerzan las pesquisas con más estudiantes, los funcionarios municipales visitan las escuelas y centros laborales para corroborar la ejecución de las normas establecidas, desinfectan las superficies, se ampliaron los cuadrante para el estudio con test rápidos y se acercan a la población los productos de primera necesidad, entre otras acciones.

“Este es un foco que está en condiciones, en los próximos días, de cerrar y que no aporte nuevos casos”, dijo Morales, quien añadió que los resultados de PCR de este territorio en las últimas horas son negativos, lo cual da cierto nivel de seguridad, aunque deben seguir realizando pesquisas intencionadas a las personas vulnerables.

Al poblado de Lechuga, del Consejo Popular Managua en Arroyo Naranjo, también llegaron las autoridades y constataron que allí se realizan las pesquisas dos veces al día, se expende a sus pobladores comidas para llevar y han vendido módulos en las tiendas en moneda convertible.

Esta comunidad de poco más de 240 núcleos familiares donde no han surgido casos, constituye un punto de intersección entre los municipios de Arroyo Naranjo y Cotorro, pero se estudia por su cercanía a Cuatro Caminos y Mayabeque.

Morales Ojeda no quiso dejar pasar la ocasión para considerar que es momento para fortalecer la higiene, la epidemiología y la microbiología; y usar más las plataformas informáticas como la auto pesquisa virtual.

También, las autoridades estudiaron el tratamiento a las arbovirosis en los municipios visitados y recalcaron que los casos de arbovirosis hay que aislarlos, bajar la focalidad, incorporar más la participación de la población en la lucha antivectorial, analizar el tema de las viviendas cerradas y captar a más operarios integrales.

Torres Iríbar indicó que los Gobiernos y Partidos de los municipios tienen que buscar fuerza de trabajo, como los trabajadores interruptos, para que, cuando los asociados al Ejército Juvenil del Trabajo (EJT) se retiren en agosto, no queden vacíos los puestos y dejen de realizarse las acciones antivectoriales. A su vez, Portal Miranda, subrayó la necesidad de velar por la calidad del trabajo para combatir las dos enfermedades, el COVID-19 y el dengue.

Fuente: Tribuna de La Habana