Brote de la enfermedad por virus del Ébola en República Democrática del Congo

El brote de la enfermedad del virus del Ébola (EVE) en las provincias de Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri en la República Democrática del Congo continúa, con 8 zonas de salud y 66 áreas de salud que informaron casos confirmados en los últimos 21 días (11-31 de agosto de 2019). Desde nuestro último informe el 25 de agosto de 2019 (Boletín Semanal 34 d ela OMS), ha habido 63 nuevos casos confirmados y 45 nuevas muertes. En los últimos 21 días, el número de nuevos casos confirmados ha fluctuado, con 68 reportados en la semana 32 (semana que terminó el 10 de agosto de 2019), 57 en la semana 33 (semana que termina el 17 de agosto de 2019) y 63 en la semana 34 (semana que termina el 24 de agosto de 2019). Los principales puntos críticos del brote en los últimos 21 días son los casos de Beni (22%; n = 45), Kalunguta (14%; n = 28) y Mandima (11%; n = 22) respectivamente. Kalunguta es ahora el segundo punto caliente en lugar de Mandima. Doce zonas de salud, a saber, Mambasa, Beni, Kalunguta, Katwa, Mandima, Musienene, Butembo, Komanda, Mutwanga, Mabalako, Mwenga y Kayna han informado nuevos casos confirmados en los últimos siete días y siguen siendo puntos de atención.
Al 31 de agosto de 2019, se han notificado un total de 3 031 casos de EVE, incluidos 2 926 confirmados y 105 casos probables. Hasta la fecha, se han informado casos confirmados de 29 zonas de salud: Ariwara (1), Bunia (4), Komanda (43), Lolwa (3), Mambasa (32), Mandima (264), Nyakunde (1), Rwampara ( 8) y Tchomia (2) en la provincia de Ituri; Alimbongo (5), Beni (661), Butembo (279), Goma (1), Kalunguta (164), Katwa (647), Kayna (22), Kyondo (20), Lubero (31), Mabalako (371), Manguredjipa (18), Masereka (50), Musienene (84), Mutwanga (31), Nyiragongo (3), Oicha (55), Pinga (1) y Vuhovi (103) en la provincia de Kivu del Norte y Mwenga (6) en el sur Provincia de Kivu.

Al 31 de agosto de 2019, se registraron un total de 2 031 muertes, incluyendo 1 926 entre los casos confirmados, lo que resultó en una tasa de letalidad entre los casos confirmados del 66% (1 926/2 926). El número acumulado de trabajadores de salud afectados permanece en 156, que es el 5% de los casos confirmados y probables hasta la fecha.
El rastreo de contactos está en curso en 23 zonas de salud. Un total de 16 370 contactos se encuentran en seguimiento al 31 de agosto de 2019, de los cuales 14 531 se han visto en las últimas 24 horas, que comprenden el 89% de los contactos, comparable a los de los últimos siete días (88%). Las alertas en las provincias afectadas continúan siendo generadas e investigadas. De las 2 058 alertas procesadas (de las cuales 1 988 eran nuevas) en las zonas de salud que informaron el 31 de agosto de 2019, 1993 fueron investigadas y 365 (18%) fueron validadas como casos sospechosos.
El 17 de julio de 2019, el Director General de la OMS, Dr. Tedros Ghebreyesus, declaró el brote de EVE en la República Democrática del Congo como una Emergencia de Salud Pública de Preocupación Internacional (PHEIC), luego de una reunión del Comité de Regulaciones Internacionales de Salud para EVE.

Interpretación de la situación por la OMS
La respuesta al brote de EVE en la República Democrática del Congo sigue siendo cuestionada por la continua inseguridad y los focos de resistencia de la comunidad. Una revisión de los indicadores clave de rendimiento en la semana 34 (19-25 de agosto de 2019) muestra, en comparación con la semana anterior, un aumento en el número de nuevos casos confirmados, una disminución en la proporción de muertes en la notificación, persistencia de la baja proporción de nuevos casos confirmados listados como contactos y una extensión de las áreas de salud afectadas. Todos estos, junto con la adición de Kalunguta como un área de punto caliente, son motivo de gran preocupación. Las autoridades locales y los socios deben continuar su respuesta sólida a la enfermedad, utilizando medidas de salud pública y de salud comunitaria nuevas y comprobadas, mientras que los donantes deben asegurarse de que el financiamiento esté presente para permitir esto y garantizar que no haya una mayor distribución geográfica de la enfermedad.