El brote de cólera en los asentamientos de refugiados del distrito de Hoima, en el oeste de Uganda, continúa. Si bien el brote inicialmente mejoró, la reducción en la incidencia se ralentizó en las últimas dos semanas, con un promedio diario de 20 nuevos. Desde el último informe el 9 de marzo de 2018, se informaron 342 casos y una muerte. El 21 de marzo de 2018, 13 nuevos casos sospechosos fueron informados, lo que hizo que el número de pacientes ingresados ​​en los Centros de Tratamiento de Cólera se elevara a 25.

Desde el comienzo del brote el 15 de febrero de 2018, se acumula un total de 1826 casos sospechosos de cólera, con 36 muertes (tasa de letalidad 2,0). El brote aún se localiza en tres subcondados: Kyangwali, Kabwoya y Buseruka. La mayoría de los casos son refugiados recién llegados de la República Democrática del Congo.

Se recolectaron y analizaron 97 muestras, de las cuales 21 fueron positivas por cultivo a Vibrio cholerae, 72 fueron positivas en la prueba de diagnóstico rápido y los resultados de 13 muestras están todavía pendientes. Resultados de cultivos previos aislados mostraron V. cholerae O1 y O139 cepas.

Aunque la tendencia del brote de cólera en el distrito de Hoima sigue disminuyendo, la tasa se ha ralentizado en las últimas dos semanas, señalando algunos problemas con el efectividad de la respuesta en curso. El flujo continuo de refugiados de la República Democrática del Congo también aumenta el potencial de transmisión. Lo que añadido al hecho de que el distrito no ha recibido ninguna la financiación para las actividades de respuesta desde el comienzo del brote, es motivo de gran preocupación.

El distrito requiere fondos urgentes para implementar actividades de respuesta efectivas en las comunidades afectadas. Intervenciones de respuesta a brotes, especialmente WASH y movilizaciones sociales, es necesario mejorarla para evitar una mayor transmisión y el riesgo de propagación geográfica de la enfermedad.

Fuente: Organización  Mundial de la Salud