Ejercicios en la medicina de rehabilitación
Ling dividió la gimnasia en 4 ramas: pedagógica, médica, militar y estética. Aunque no dejó una obra escrita, sus tratados fueron dados a conocer por su discípulos Liedbek y Georgii en “Fundamentos generales de gimnasia” en 1840 donde se incluye el término kinesioterapia, entendiendo como tal la noción general de ejercicios metódicos que ejecuta el enfermo solo, por prescripción médica, el terapeuta de un paciente pasivo, o el terapeuta y paciente juntos.
El sistema de Ling de ejercicios necesitaba una continua atención personal del terapeuta. Gustav Zander llegó a la conclusión de que con palancas, poleas y pesas (mecanoterapia) podían ofrecer a la vez resistencia y asistencia, eliminando al terapeuta, salvo para lograr que el paciente comenzara el tratamiento y para una supervisión periódica. Weir Mitchell fue quien trasladó los conocimientos de la gimnasia europea a las universidades de los Estados Unidos.
El estallido de la Primera Guerra Mundial hizo que se incrementara el uso de los ejercicios físicos para rehabilitación en los hospitales militares de los países contendientes.
En los Estados Unidos W. G. Wright desarrolló técnicas cinesiterápicas, especialmente en el entrenamiento de los parapléjicos para caminar sobre muletas valiéndose de las extremidades superiores. C. L. Lowman desarrolló la hidrocinesiterapia como término y como método.
En Alemania, después de la Primera Guerra Mundial, cambió la actitud hacia los ejércitos, dándosele cada vez más importancia a la relajación. De esta manera se insistió en que se incluyeran ejercicios de relajación en los programas terapéuticos.